La Comisión Europea (CE) autorizó ayer a mediodía la compra del Abbey National por parte del Santander Central Hispano. Unas horas antes, a las 7.00, el británico Halifax Bank of Scotland (HBOS) anunciaba que no iba a presentar una contraoferta. Emilio Botín, que estaba en Londres, supo que había ganado y lanzó el mayor suspiro de alivio de su vida.

Con un comunicado de cinco líneas, la CE autorizó la compra porque "la adquisición no plantea problemas desde el punto de vista de la competencia, puesto que las dos entidades desarrollan su actividad fundamentalmente en países diferentes". La Comisión hizo este comunicado dos días antes de que venciera el plazo para dar su aprobación. Algo debían intuir en el Banco Santander, puesto que ayer, a las 8 de la mañana, la plana mayor de la entidad, encabezada por Botín y su consejero delegado, Alfredo Sáenz, se enfrentaba a 250 analistas, convocados en el auditorio londinense de Lehman Brothers, en Fleet Street.

Aunque hasta 10 días antes de que se celebre la junta de Abbey (el 14 de octubre), cualquier banco puede presentar contraoferta, el banquero cántabro ya da por hecho que se ha librado de tener que aumentar la oferta de 13.400 millones de euros.

CALENDARIO Al tiempo que se informaba a los analistas ingleses, el banco enviaba el calendario a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). El día 17, enviará el folleto de información completo a los accionistas; la junta de Abbey se celebrará el 14 de octubre; y la del Santander, el 21. Se espera que la adquisición finalice el 12 de noviembre.