Aunque no viene a menudo por Extremadura, confiesa que siempre que lo hace le sorprende esta tierra de contrastes que vio nacer a su padre. Reyes Estévez apadrinó el pasado sábado la VI edición del Cross Popular Ciudad de Almendralejo y terminó encantado, según confesaba a todo el que le preguntaba apurada la exigente prueba. Y eso que no ganó el barcelonés, lo hizo el almendralejense Pablo Villalobos, que fue el que más elogios se llevó del campeonísimo en la comparecencia de éste último ante los periodistas.

--¿Qué tal por Extremadura?

--Ah, muy bien. Siempre que vengo me encuentro como en casa. Y eso que no lo hago a menudo. La última vez que vine creo que fue a Cáceres y también para disputar una prueba atlética.

--¿Y qué recuerdos se lleva?

--Pues muchos y muy buenos. Mi padre, que nació en Alburquerque, me ha hablado mucho de cosas que luego yo he comprobado por mí mismo. El calor de las gentes, el otro calor que nos ha acompañado en jornadas con temperaturas muy altas... El gran nivel de la prueba, el enorme trabajo que Emilio Vivas y su gente están haciendo en Almendralejo. ¿En lo gastronómico? La verdad es que también muchas cosas, pero el ibérico es el ibérico. Y no lo hemos hecho nada mal también en ese sentido.

--En la carrera, el segundo...

--Sí. La verdad es que Pablo Villalobos ha corrido muy bien y ha sido un digno ganador de la prueba. Ahora espero que otras citas, para las que me estoy preparando creo que convenientemente, terminen igual de bien para mí (risas)...

--Y de la organización de la carrera, ¿qué hay que decir?

--Pues que ha rayado a un gran nivel y que hay que seguir trabajando porque en esta dinámica y en la misma progresión se puede convertir en una de las citas más importantes del calendario nacional y ojalá que pronto internacional.

--Se ha guardado un minuto de silencio en memoria de Gregorio Rojo, el que fue tu entrenador, recientemente fallecido...

--Gregorio fue mucho más que mi entrenador. Se trata de la persona que me enseñó todo del atletismo, de la propia vida... Ha sido un segundo padre para mí y guardo un imborrable recuerdo de todo lo que me enseñó a lo largo de mi vida y mi carrera.