Esperanza Aguirre acusó ayer a Rafael Simancas de provocar la investidura para "salvar su carrera política" aun a costa del "naufragio de Zapatero", y descargó la responsabilidad de la crisis institucional de la Comunidad de Madrid "exclusivamente" en la lucha interna de los clanes de los socialistas madrileños.

En un debate que la portavoz del PP tildó de "trampa", Aguirre reiteró a los socialistas e Izquierda Unida (IU) su oferta para acordar una fecha para que las nuevas elecciones se celebren antes de fin de año.

VINCULAR AL PP SIN PRUEBAS

La portavoz popular aseguró que "no hay pruebas" de que exista relación entre militantes del PP y el "acto de indisciplina" de Eduardo Tamayo. En toda su intervención, Aguirre puso el adjetivo "socialistas" cada vez que se refirió a los dos diputados traidores.

Igual que el diputado desleal, se quejó de que el PSOE hubiera dado a conocer las llamadas de Tamayo al abogado y afiliado al PP Juan Esteban Verdes, y al secretario general de los populares madrileños, Ricardo Romero de Tejada.

La portavoz del Partido Popular dijo "desconfiar" de Simancas, del PSOE y de IU. Y tras ser requerida por los diputados socialistas añadió: "Del Grupo Mixto, tampoco". En su réplica, Rafael Simancas reiteró que los que forman la trama inmobiliaria "quieren que sigan las políticas del PP". "De usted", le dijo a Aguirre, "sí se fían los especuladores".

RAZONES DE TAMAYO

Simancas explicó con ironía que Tamayo no ha sido desleal porque sea un socialdemócrata moderado o porque le interese la política educativa. Son otras razones "contantes y sonantes", dijo, las que le han llevado a la traición. Y aseguró que antes de las nuevas elecciones, "se conocerá todo".