Era, sin duda, el terrorista más buscado por las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado. Mikel Kabikoitz Carrera Sarobe, alias Ata, considerado el actual número uno de ETA, fue detenido ayer en la localidad francesa de Bayona. Iba acompañado de su lugarteniente, Arkaitz Agirregabiria, el hombre que le habría sustituido en la cúpula etarra y que está acusado de participar en el atentado que acabó con la vida de un policía francés cerca de París. La captura de Ata es "más importante que el arresto de Txeroki ", aseguró ayer el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, quien no quiso pasar por alto que Ata era el quinto miembro del comité de dirección de la banda (la ZUBA) que rompió la tregua en el 2007.

Desde que Ata tomó las riendas de ETA tras la caída de Ibon Gogeascoetxea, el pasado marzo, su protagonismo en la toma de decisiones para intentar reactivar a la debilitada organización terrorista era casi absoluto. Ahora falta analizar el importante material que los agentes se han incautado en el dúplex en el que fue detenido junto a su lugarteniente y a Maite Aranalde, que se encontraba huida desde que el juez Eloy Velasco la dejó en libertad bajo fianza por un error.

Los expertos en la lucha antiterrorista atribuyen a Ata el diseño de la actual estrategia etarra y de las últimas acciones: el asesinato de dos guardias civiles en Mallorca, el atentado en la casa cuartel de la Guardia Civil en Burgos y el proyecto de trasladar las fábricas de bombas de la banda a Portugal y Cataluña ante la asfixiante presión policial que los terroristas sufren en el sur de Francia. La opción lusa fracasó porque la furgoneta alquilada por Ata con documentación falsa y cargada de material para construir bombas fue interceptada

Pasa a la página siguiente