La policía francesa detuvo el lunes a dos presuntos islamistas acusados de ayudar a Hasan el Haski, acusado de ser uno de los dirigentes del Grupo Islámico de Combatientes Marroquís (GICM). Según fuentes, los detenidos ayudaron a El Haski con el traslado y la seguridad de cuando éste pasó una temporada a las afueras de París tras dejar España días antes de los atentados.

El Haski fue detenido en Lanzarote e ingresado en prisión el 21 de diciembre. Como dirigente del GICM está acusado de "haber participado en la ideación, preparación y contribución de los atentados terroristas", según afirmaba el juez encargado de la investigación de los atentados del 11-M.