El jefe de prensa de Batasuna, identificado también como miembro del equipo de comunicación del Partido Comunista de las Tierras Vascas (EHAK en euskera), Joseba Zinkunegi Garmendia, ingresó ayer en prisión por orden del juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska, que le acusa de pertenencia a ETA, por no haberse presentado en comisaría.

Zinkunegi, que alegó que se había "olvidado" de ese trámite el viernes, fue arrestado cuando a las nueve de la mañana acudía a una comisaría guipuzcoana de la Ertzaintza. En ella le comunicaron que el juez había ordenado su arresto al haber incumplido el pasado viernes una de las dos comparecencias obligatorias en dependencias policiales, como había decretado Grande-Marlaska hasta que abone la fianza de 100.000 euros impuesta para eludir la cárcel. A primera hora de la tarde de ayer, el juez varió la situación procesal del detenido y dictó orden de prisión incondicional sin fianza.

La abogada y exparlamentaria de Batasuna Jone Goirizelaia alegó que Zinkunegi tuvo problemas la tarde del viernes para "acudir a tiempo" a comisaría. La obligación que el juez impuso a Zinkunegi, y a los otros dos responsables de prensa de Batasuna y EHAK, Juan José Petrikorena y Peio Gálvez, fue la de presentarse todos los días hasta mañana en la comisaría más próxima a su domicilio. Debían hacerlo entre las 9 y 10 de la mañana y de las siete a las ocho de la tarde.

Fuentes oficiales precisaron que Grande-Marlaska esperó hasta las 12 de la noche del viernes para dictar la orden de detención de Zinkunegi. Ayer, Goirizelaia arremetió contra el juez. Precisó que desde un punto de vista jurídico "no hay por dónde coger" la orden contra Zinkunegi. Añadió que la medida "no tiene sentido", porque carece de lógica detener a una persona cuando acude a la policía. Dijo que esta decisión demuestra que el juez está "empeñado" en seguir poniendo "trabas a lo que hay que hacer en positivo".

DINERO PREPARADO Goirizelaia confirmó, además, el éxito de la cuestación abierta por la ilegalizada Batasuna para recoger los 300.000 euros necesarios para abonar las fianzas de Zinkunegi, Petrikorena y Gálvez. Señaló que el dinero está preparado para hacerlo efectivo mañana, dentro del plazo marcado por el juez, quien deberá decidir la situación de los imputados.

La letrada, por otro lado, denunció un "impulso policial" en la causa abierta contra EHAK. Pidió que se aclare por qué la Asociación de Víctimas del Terrorismo añadió a su querella un informe elaborado por la policía y reclamó que se levante el secreto de las diligencias porque, en su opinión, Grande-Marlaska hace de él un "uso fraudulento". Las actuaciones contra EHAK fueron criticadas por el fundador del partido, Juan Carlos Ramos, quien dijo estar "hartito" de la "persecución" que sufren.