La vista del caso Palma Arena cumple ya su segunda semana y en el PSOE consideran que, pese a la gravedad de las acusaciones que se ciernen sobre Jaume Matas, el PP está sufriendo un desgaste mínimo. La dirección del partido ha decidido, pues, elevar el tono de sus críticas hacia la abulia de Mariano Rajoy y su equipo a la hora de condenar al expresidente balear.

Una estrategia que, además de incrementar el acoso político contra los populares por la acumulación de casos de corrupción, persigue sacar más rédito a la estrecha relación en el pasado entre el ahora máximo dirigente del PP y el que fuera ministro de Medio Ambiente con José María Aznar en la Moncloa.

"¿Hay alguien ahí?" se preguntó ayer irónicamente la portavoz de los socialistas, Elena Valenciano, por el silencio --hasta ayer-- de Rajoy, y su tímida reacción tras conocerse la baja temporal y voluntaria del imputado: "Rajoy dijo hace unos años que Matas expresaba el modelo de lo que era un buen gobierno. ¿Sigue siéndolo ahora? ¿Va a hacerse cargo alguna vez de su partido, de sus propios amigos?".

Otro objetivo del PSOE es ahondar en la presunta financiación ilegal del PP. "Son ya muchos los dirigentes del PP encausados. Cada vez es más larga la lista de explicaciones que debe dar Rajoy sobre esta megatrama de corrupción", concluyó Valenciano.