El partido socialista descarta descolgarse de los pactos de Estado contra el terrorismo y sobre la reforma de la justicia. En la dirección del PSOE se asegura que no se caerá en las "provocaciones" de José María Aznar cuando, al plantear su ofensiva legal para luchar contra el terror y la inseguridad, asegura que se llevará adelante "aunque no tenga el apoyo de la oposición".

El partido de José Luis Rodríguez Zapatero está "plenamente dispuesto" a alcanzar el consenso sobre ambas materias, según reiteró ayer su portavoz parlamentario, Jesús Caldera.

"No les daremos el gusto de descolgarnos de ningún pacto" aseguró un alto dirigente socialista. Es más, en el entorno de Zapatero se cree que las modificaciones legales acabarán incorporando los criterios sobre la reinserción que defiende el partido socialista, como ocurrió con sus enmiendas y las de CiU a la ley de partidos, aprobada para ilegalizar a Batasuna.

DAÑAR A ETA

En la reunión que hoy celebran todas las fuerzas políticas firmantes del pacto para la reforma de la justicia, se abordará tanto el endurecimiento de las penas para los terroristas como las nuevas condiciones para la concesión de la libertad provisional. El dirigente del PSOE Juan Fernando López Aguilar defenderá la articulación de una buena política criminal "que haga daño a ETA."

En ese marco, López Aguilar señaló que la reinserción es considerada por el PSOE como un elemento clave porque para la organización terrorista "un reinsertado es un derrotado." A su juicio, la delación que propone el Gobierno es una alternativa para el arrepentido, pero considerarla como vía obligatoria, "además de inviable, es innecesaria".

El partido socialista está dispuesto a pelear hasta el final para que la reinserción exija un compromiso activo de no colaborar con la violencia, una condena sin paliativos del terrorismo y el resarcimiento económico a las víctimas, todo ello en el marco establecido por la Constitución.

El PSOE defenderá también que el consenso en estas cuestiones es "exigible" por los dos pactos que el PP firmó con el PSOE, el antiterrorista y el de reforma de la justicia. En su opinión, estos dos ámbitos son los adecuados para resolver los cambios legislativos que faciliten una lucha más eficaz contra ETA y contra la delincuencia en general.

PLAN CON ESCASAS NOVEDADES

La prisión preventiva y el acceso al desempeño de la abogacía también serán tratados en el encuentro de hoy. Caldera advirtió de que el anuncio del presidente del Gobierno de emprender reformas legales para frenar la delincuencia contiene escasas novedades y señaló que el Ejecutivo debería reconocer su "fracaso" en la seguridad ciudadana.

Por su parte, CiU advirtió ayer a José María Aznar de que no debe dar por descontado su apoyo a la propuesta de elevar a 40 años el cumplimiento de las penas para los terroristas, matizando así unas declaraciones de su consejera de Justicia, Núria de Gispert, realizadas el pasado sábado.