Mariano Rajoy acudirá hoy a la Moncloa "sin reservas y con espíritu constructivo", pero también con prudencia. En la entrevista concertada con el presidente, el líder del PP tiene dos objetivos: transmitirle que el PP está dispuesto a colaborar en el fin de ETA y recabar "información coherente y completa" sobre el alto el fuego. Para ahuyentar cualquier imagen de inmovilismo y escenificar su apuesta por el diálogo, tras la reunión del comité ejecutivo del PP no fue el secretario general, Angel Acebes, quien compareció ante las cámaras. Acebes fue relegado por Gabriel Elorriaga y Soraya Sáenz de Santamaría, de perfiles más moderados.

La entrevista dio ayer mucho trabajo a Rajoy. Primero reunió a su círculo más cercano en los tradicionales maitines de los lunes. Según algunos asistentes, la idea más repetida fue la de "contribuir a un clima positivo y de entendimiento", y transmitir con claridad que la pretensión del PP es "apoyar" a Zapatero, pero "con ánimo vigilante".

Tras escuchar las opiniones de sus dirigentes de confianza, Rajoy recibió a la cúpula del PP vasco y después presidió la reunión del comité ejecutivo nacional del partido, prevista para el 3 de abril pero adelantada tras el alto el fuego. A la salida, Elorriaga informó de que quienes tomaron la palabra --incluida la presidenta del PP vasco, María San Gil-- coincidieron en respaldar las actuaciones de Mariano Rajoy, aunque se mostraron preocupados por la nueva situación.

Sin embargo, quien tuvo una intervención más relevante fue Manuel Fraga. El expresidente gallego recordó a los suyos la necesidad de evitar en estos días "manifestaciones de intransigencia que la gente no desea ni entiende", y también recomendó a Rajoy que no siga "los planteamientos de la COPE".

SIN EXIGENCIAS El líder del PP no se presentará en la Moncloa con un documento en el que detalle su oferta ni sus exigencias, más allá de los principios de un pacto antiterrorista que, para el PP, sigue vigente. Pero los conservadores no exigirán su convocatoria formal. En palabras de Elorriaga, "lo importante es lo sustantivo, no lo instrumental". Es decir, que si Rajoy se reúne con el presidente, "da igual que no lo haga la comisión de seguimiento" del pacto. Las líneas rojas que Rajoy expondrá a Zapatero son el rechazo a "pagar precios" a ETA y a que el Estado "entre en tregua", y pedirá que las víctimas reciban "todo el reconocimiento posible".

Para no crispar el encuentro, el PP ni siquiera ha hecho caso de las noticias sobre contactos indirectos del Gobierno con ETA. Elorriaga dijo que no iba a hacerse eco de "filtraciones e informaciones no todas coincidentes", pero subrayó que el tema "merece una explicación". De lo dicho por Zapatero, los populares se quedan con que "este comunicado no vale porque no anuncia la disolución" de ETA. En eso están de acuerdo.