Tiene más inconvenientes que ventajas. Es la conclusión a la que ha llegado José Luis Rodríguez Zapatero y la que motiva que, a día de hoy, descarte proponer a María Teresa Fernández de la Vega para encabezar la candidatura del PSOE al Ayuntamiento de Madrid en las elecciones del próximo mayo, según fuentes del Gobierno. El cese de la vicepresidenta abriría un roto de enormes dimensiones en el Ejecutivo, según fuentes del mismo, porque en la actualidad es el eje sobre el que pivota la acción diaria de gobierno. Zapatero nunca ha llegado a proponerle el cambio a la vicepresidenta, pero ha bromeado con ella sobre cómo iba creciendo "la bola" de su posible candidatura, según apuntan varias fuentes.

El líder del PSOE había cedido en la últimas dos semanas a las presiones del partido y había aceptado incluir a la vicepresidenta entre los posibles aspirantes a la alcaldía.

VALORACION La excelente valoración de la vicepresidenta, que encabeza el ránking de los miembros del Gobierno en todas las encuestas de popularidad, la han convertido en pieza codiciada por los socialistas madrileños, desencantados tras el rechazo de José Bono.

Estos últimos 10 días, Zapatero y miembros del Gobierno han reflexionado sobre la cuestión, para analizar los pros y los contras, y han concluido que los segundos superan a los primeros. Pero ha sido el convencimiento de que es más fácil hallar "un buen candidato a alcalde que una buena vicepresidenta" lo que ha devuelto a Zapatero a su negativa de prescindir de su número dos, según las fuentes.

Solo hay una posibilidad de que De la Vega acabe en la lista del PSOE por Madrid, apuntan fuentes de su entorno, y es que las encuestas que está haciendo el partido en la capital arrojen un resultado que "garantice" que su presencia daría al PSOE una doble victoria: en el ayuntamiento y en la comunidad.