Sábado 22 de mayo. La agenda oficial de Guillermo Fernández Vara comienza a las nueve de la mañana. Tiene que inaugurar el II Congreso de la Sociedad Científica Veterinaria de Salud Pública y Comunitaria. Es en el Centro de Cirugía de Mínima Invasión, en Cáceres. Mismo día, hora y media más tarde, el presidente de la Junta de Extremadura debe asistir a otra inauguración, la del encuentro de Consejos Escolares de la Confederación Católica Nacional de Padres de Familias y Padres de Alumnos (Concapa) en el Hotel Badajoz-Center, a 93 kilómetros de la capital cacereña.
El planificador de rutas de ViaMichelin (www.viamichelin.com) estima que, en el mejor de los casos, se tardarían 86 minutos en completar este recorrido. Eso sí, siempre que se haga respetando los máximos de cada vía. Así las cosas, al presidente extremeño, y a su chófer, le habrían quedado dos opciones de querer ser razonablemente puntuales: o circular por encima de los límites de velocidad o, algo poco probable, conseguir despachar el primero de los actos en solo cuatro minutos.
No se sabe a qué velocidad recorrió finalmente Vara este trayecto, pero sí que solo dos días después, el pasado lunes, su coche oficial fue multado por circular a 170 kilómetros por hora (50 más de lo permitido) en la autovía A-5, cuando regresaba de Madrid tras intervenir en el Senado. Un vistazo a la agenda del jefe del Ejecutivo extremeño permite comprobar que las situaciones como las del sábado 22 no son una excepción. El jueves de esta misma semana, por ejemplo, tenía dos actos en Plasencia y Mérida separados por dos horas (hora y 37 minutos de viaje, según ViaMichelin) y el 6 de mayo pasado otros tres en Mérida, Badajoz y Cáceres en menos de tres horas. Vara ya ha dejado en el aire la posibilidad de recortar su apretada agenda --"por mi seguridad y la de quienes me acompañan", dice--. "En estos tiempos difíciles he querido hacer compatible el trabajo de planificación, la gestión de la crisis y la proximidad con los ciudadanos", ha escrito Vara en su blog sobre este tema. En lo que va de legislatura, ha visitado más de doscientos pueblos extremeños y las inauguraciones, las entregas de premios o las reuniones son el pan de cada día en su agenda.
POSTURA DEL PP El presidente del PP en Extremadura, José Antonio Monago, anunció ayer en Badajoz que solicitará la comparecencia en el Senado de la delegada del Gobierno en Extremadura, Carmen Pereira, para que dé una explicación sobre lo ocurrido con el coche oficial del presidente de la Junta. En rueda de prensa, Monago dijo que no tiene "nada que objetar" a las explicaciones que dio al respecto el jefe del Ejecutivo regional quien, matizó, "ha dicho la verdad", y añadió que la delegada del Gobierno por el contrario ha "metido la pata". A juicio del líder del PP en Extremadura, Pereira "ha mentido" y "usó información a su antojo" y "parece que no pasa absolutamente nada" cuando "sabía con precisión" lo que había ocurrido, informa Europa Press.
Así, para los populares extremeños, Carmen Pereira "conocía perfectamente los hechos y mintió a la opinión pública" y no actuó "como jefe" de la policía y la Guardia Civil "sino como delegada del PSOE para intentar tapar" lo que luego se "ha destapado como una infracción".
José Antonio Monago añadió a este respecto que la delegada "había urdido un engaño" y "quiso además, que es lo grave, echar la culpa a los policías", un hecho que calificó de "respuesta bochornosa" por lo que Pereira "tendría que asumir sus responsabilidades" y "dimitir como corresponde cuando a uno lo cogen con una mentira".
Por estos motivos, el PP pedirá la comparecencia de Carmen Pereira para que "explique todo este asunto con luz y taquígrafos", ante unos hechos que hacen que Monago lamente "la imagen que se da de los policías y la Guardia Civil", los cuales "no se merecen una delegada del Gobierno que los utilice de manera partidista para tapar sus vergüenzas".
SIN TRATO DE FAVOR Carmen Pereira, por su parte, negó ayer que hubiese existido trato de favor al presidente extremeño. En un comunicado, señaló que una vez recabada la información completa de los hechos, respecto a lo acontecido con el exceso de velo, se ha dado inicio al expediente sancionador a los conductores de los dos vehículos. La delegada insistió en que, como en "cualquier otra infracción de este tipo", la patrulla de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil abrió un expediente sancionador a los conductores de ambos vehículos, sin que "en ningún momento se produjera trato de favor alguno".
