Caen los contagios, pero también las pruebas de detección. Extremadura ha logrado reducir un 34% la tasa de incidencia del coronavirus a 14 días al pasar de 452 a 294 casos por cada cien mil habitantes en la última semana, una cifra que sigue alejando a la región de la media nacional (340) pero que aún se sitúa en un nivel de riesgo extremo. Esto significa que pese al repunte de ayer (se volvió a superar el umbral de los 200 casos y hubo otros 11 fallecidos), la curva sigue mejorando en la comunidad, donde por otra parte también han disminuido las pruebas de detección del virus.

Según los datos del Ministerio de Sanidad, entre el pasado miércoles 18 de noviembre y ayer se han realizado un total de 17.756 pruebas, que son 8.416 menos que en la semana previa (-32%). La reducción del número de personas en seguimiento, que se ha visto disminuida de forma considerable tras alcanzarse a principios de noviembre los picos más altos de contagios, según ha dicho ya el consejero de Sanidad, explicarían esa caída, junto al cambio de protocolos en el caso de los asintomáticos y contactos estrechos, a los que ya solo se realiza una PCR a los siete días. Esta reducción viene acompañada además de una ligera mejora en los resultados: el 13% de las pruebas que se realizan actualmente dan positivo, frente al 15,5% de la semana previa. En los últimos siete días se han realizado un 36% menos de PCR (17.756, frente a las 22.033 que se practicaron entre el 8 y el 14 de noviembre) y un 6,5% menos de test de antígenos (de 4.139 a 3.866), que diagnostican ya uno de cada cuatro positivos.

Por lo que respecta a los datos de la última jornada, hay que destacar que tras cuatro días, Extremadura volvió a superar ayer el umbral de los 200 casos. Fueron en concreto 203 (26 más que el martes) que se dejaron notar sobre todo en las áreas de Badajoz (44) y Cáceres (37). Se comunicaron tres brotes en Badajoz (6 positivos y 29 contactos), Don Benito (11 positivos y 17 contactos) y Pueblonuevo de Miramontes (6 positivos y 20 contactos). Se cerraron cuatro en Torreorgaz, Santa Amalia y Mérida (dos), por lo que el total de focos activos se eleva a 83.

Al repunte de casos positivos hay que sumar además otros 11 fallecimientos que elevan a 923 el total de víctimas desde el inicio de la pandemia. Todas las áreas excepto Badajoz y Mérida comunicaron decesos, situándose a la cabeza Plasencia con tres: un varón de 74 años de Zarza de Granadilla, una mujer de 72 años de Mirabel y otra de 83 de Garganta la Olla.

A estos hay que añadir dos mujeres de 90 y 98 años de Vegaviana; un varón de 84 años de la residencia Sierra Pinar de Zafra; una mujer de 68 años de Fuente del Maestre; un varón de 96 años de Aliseda (en el municipio la situación ha mejorado y desde esta madrugada se han levantado las restricciones); un hombre de 75 años de Cáceres ; otro varón de 93 de Navalvillar de Pela y una mujer de 53 años de Casatejada.

Por lo que respecta a la hospitalización, el parte remitido ayer por la Junta comunica 261 pacientes ingresados, 11 menos que el martes. La presión asistencial ha caído un 17% en la última semana (56 pacientes menos) y la ocupación de las camas covid ha pasado del 10% al 8%, pero la situación en las UCI sigue siendo preocupante. En estos momentos son 44 los pacientes en cuidados intensivos, los mismos que ayer y 10 menos que hace una semana. Aún así, según datos del ministerio la ocupación de las camas UCI sigue siendo del 26%, un indicador en riesgo.