Un paso más para que la alta velocidad pueda llegar a Extremadura. El Ministerio de Fomento, a través de Adif Alta Velocidad, ha aprobado la licitación del contrato de obra y mantenimiento de las subestaciones eléctricas de tracción y los centros de autotransformación asociados del tramo entre Plasencia y Badajoz de la Línea de Alta Velocidad (AVE) Madrid-Extremadura. La actuación es el paso necesario e imprescindible para electrificar la vía y por tanto para que los trenes de altas prestaciones que se prevé que circulen a partir de 2019 por la región (según la fecha comprometida por Fomento) puedan ser sustituidos ya por alta velocidad, al menos en el tramo extremeño.

La actuación, que se tiene que publicar en el BOE, cuenta con un presupuesto de licitación de 29,1 millones. De esa cantidad, 27,8 millones corresponden a la ejecución de las obras, con un plazo de 18 meses, lo que supone que los primeros trenes de alta velocidad no podrían circular por la región, como pronto, hasta el segundo semestre del 2020. Junto a la obra en sí, se han aprobado además los trabajos de mantenimiento de las instalaciones por un periodo de dos años y con un presupuesto de 1,3 millones.

La licitación que anuncia ahora Fomento supone completar los trámites administrativos que permitirán la futura electrificación de la línea de alta velocidad en la región. Estos trámites se iniciaron el pasado mes de marzo, cuando se publicó en el BOE la licitación del entonces Ministerio de Industria del suministro para las subestaciones, según informa Adif. De hecho, entonces se iniciaban de nuevo los trámites de todas las subestaciones (en el caso de Cañaveral y Carmonita, Red Eléctrica Española obtuvo en 2011 autorización administrativa previa pero no se llegó a ejecutar; y la de Sagrajas, se paralizó hasta que en 2015 se aprobó la planificación energética para el periodo 2015-2020). Junto a estas, ayer se publicó además en el BOE el anuncio para iniciar el trámite administrativo para modificar la línea aérea de transporte Almaraz- Jose María Oriol, entre Cañaveral y Casas de Millán, con un presupuesto de 1,8 millones. Esta es cuarta de las subestaciones contempladas, aunque en este caso se trata de una modificación en una ya existente.

El contrato incluye la ejecución de las obras de las instalaciones de energía necesarias para la electrificación en 2x25 kV del tramo Plasencia-Badajoz, de 164,6 km, y que principalmente son las subestaciones eléctricas de Cañaveral, Carmonita y Sagrajas. A estas subestaciones se suman un total de doce centros de autotransformación asociados.

En el caso de Cañaveral, sus centros asociados están en Malpartida de Plasencia (I y II), Garrovillas de Alconétar y Casar de Cáceres. En el caso de Carmonita, los centros asociados están en Cáceres (I, II y III) y Mérida. Por lo que respecta a Sagrajas, La Garrovilla, Torremayor y Badajoz (I y II) albergarán sus cuatro centros asociados.

suministro/ Las subestaciones eléctricas de tracción son las que permiten alimentar de energía eléctrica a las líneas de alta velocidad, transformando la tensión de 220 kV o 400 kV suministrada por Red Eléctrica Española, a los 2x25 kV necesarios para la catenaria (línea aérea de contacto). De manera complementaria, a través de ellas se alimentan otros sistemas asociados como la luminación de los túneles, la calefacción de las agujas, las telecomunicaciones móviles, o las necesidades de energía de los edificios y casetas técnicas a lo largo del trazado.

En cuanto a los centros de autotransformación que se asocian a las subestaciones, (12 en el tramo Plasencia-Badajoz) se ubican entre las subestaciones a una distancia de unos 10 kilómetros en cada caso, y lo que hacen es distribuir la energía a lo largo de la catenaria.

Los trabajos que Fomento saca a licitación incluyen la ejecución de la obra civil y construcción de las cimentaciones de hormigón de los equipamientos exteriores, la plataforma y el edificio para el equipamiento de alta y baja tensión de la subestación y de los centros de autotransformación. Además, incluyen las canalizaciones del cable de retorno hasta la vía, el montaje del material eléctrico y de control, las pruebas y puesta en servicio y el suministro de energía. Estas actuaciones van a ser cofinanciadas con fondos Feder.