Lento, pero en marcha. La nueva plataforma ferroviaria por la que discurrirá en 2020 primero un tren rápido de altas prestaciones y luego, se espera, un tren de alta velocidad acaba de dar esta semana un nuevo paso. Hace apenas unos días, Adif anunciaba la terminación de las obras de la plataforma en dos tramos de unos diez kilómetros en total entre Cáceres y Plasencia y esto supone el fin de una etapa: la plataforma ya está completa entre Plasencia y Badajoz. Faltan, eso sí, unos seis kilómetros y medio en el tramo Estación de Plasencia Plataforma-Ramales de conexión de Plasencia, «que se encuentran en un grado de avance muy alto», explican desde el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif). Este último tramo permitirá la conexión de la nueva línea con la convencional en Plasencia.

Una vez lista la plataforma, el siguiente paso es el montaje de la vía ferroviaria en toda su extensión. Estos trabajos de colocación de las traviesas y los raíles por los que discurrirán los nuevos trenes comenzaron entre Cáceres y Mérida en septiembre del 2017 y ahora también se están extendiendo por el resto de trazados. «El montaje de vía se está realizando ya en los tramos Mérida-Badajoz, Cáceres-Mérida y Plasencia-Cáceres», señalan. ¿Cuándo se terminará? «Está previsto que el montaje de vía esté finalizado a finales de 2019», apuntan desde Adif.

Así, las actuaciones que se desarrollan en la actualidad en todo el trazado consisten en el extendido de balasto, la instalación de traviesas polivalentes (lo que permite a cambio de ancho ibérico o internacional, habitual en las líneas de alta velocidad españolas) y de los raíles, entre otras. Al mismo tiempo, también se está trabajando en las subestaciones eléctricas (tres, en Cañaveral, Carmonita y Sagrajas) y en los centros de autotransformación asociados (doce en total) entre Badajoz y Plasencia, actuaciones necesarias para la electrificación y cuyas obras se adjudicaron el pasado enero.

LA SEGUNDA FASE / Con estas actuaciones se concluirá la primera fase del nuevo trazado extremeño por el que se esperan que puedan circular trenes con mejores prestaciones que los actuales a partir del próximo año 2020. Aún así, el objetivo final no es solo mejorar la conexión ferroviaria dentro de Extremadura, sino también fuera para poder llegar hasta la capital de país, pero para eso todavía falta mucho más trabajo y tiempo. El trazado entre Madrid-Oropesa aún está en pañales mientras el que une Oropesa con Plasencia sí está avanzando poco a poco. Esta última parte suman algo más de 68 kilómetros que están divididos en siete tramos, todos ellos ya adjudicados (el último fue el pasado 26 de junio) o finalizados.

El siguiente paso fundamental para poder hablar de alta velocidad es la electrificación de la vía que, de momento, solo está proyectada en el trazado extremeño (de Badajoz a Plasencia). En 125 kilómetros (entre Plasencia y la bifurcación de Peñas Blancas, en Mérida) las obras necesarias para dar este paso -que permitirá la circulación de trenes eléctricos en lugar de los diésel que comenzarán a funcionar en 2020- ya se han licitado, mientras continúan estando pendientes los trámites ambientales para iniciar la electrificación en el resto del trazado (entre Mérida y Badajoz).