La Guardia Civil ha detenido a nueve personas por la falsificación de 34 tarjetas de la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) en cinco localidades de la provincia de Badajoz mediante las que se efectuaron durante varios años 67 inspecciones falsificadas, según informó ayer la Delegación del Gobierno en Extremadura mediante un comunicado.

Las localidades donde han sido intervenidas las tarjetas son Mérida, Arroyo de San Serván, La Garrovilla, Lobón y Valencia del Ventoso. Los detenidos implicados en la "trama" son los vecinos de Mérida F.N.M., de 41 años, y L.T.C., de 43 años; el vecino de Lobón A.P.R., de 49 años; C.P.R., de 35 años y vecino de La Garrovilla; los vecinos de Arroyo de San Serván A.F.P.G., de 30 años, y P.J.P.R., de 35; J.A.G.G., de 26 años y vecino de Valencia del Ventoso; y los vecinos de Aldea de Retamar (Badajoz) A.S.B., de 42 años, y C.S.B., de 33 años.

Según la Delegación gubernativa, uno de los detenidos era personal laboral de la ITV de Mérida y actuaba como autor material de la falsificación de las tarjetas, mientras que el resto contactaba con los propietarios de los vehículos interesados en efectuar la revisión, aunque en ocasiones éstos eran quienes se ponían en contacto con ellos.

SIN LLEVAR EL COCHE Los propietarios superaban la revisión sin llevar sus vehículos a la estación de ITV y sin pagar las tasas correspondientes ya que el empleado del centro falsificaba la firma y usaba el sello de forma ilegal en las tarjetas intervenidas. Asimismo, en algunas ocasiones fueron grabadas informáticamente las supuestas inspecciones para dificultar su descubrimiento.

Las diligencias instruidas, los detenidos y las tarjetas intervenidas han sido puestas a disposición de los juzgados de Instrucción de Mérida. La consejera de Fomento, Leonor Martínez-Pereda, dijo ayer sobre este caso que la Junta puso el caso en manos de la Guardia Civil en el verano de 2003 y que no se falsificaron tarjetas sino sellos y firmas.

El verano del pasado año, explicó: "La Dirección General de Transportes de la Consejería de Fomento apreció una serie de irregularidades, lo que llevó a pensar, sin ningún tipo de pruebas, que podía estar cometiéndose algún fraude. Pusimos de manifiesto esto a la Guardia Civil para que se pusiera a trabajar".

Además, continuó, a la Benemérita se le entregó documentación sobre unos 100 vehículos que deberían haber pasado la ITV y no lo hicieron para que "se pudiera operar", aunque puntualizó que esto no quiere decir que sus propietarios estuvieran implicados en el fraude.

Agregó que un trabajador de la ITV falsificó el sello y la firma del inspector mecánico que certifican las inspecciones "y no la tarjeta en sí". Durante el año en que se ha desarrollado la investigación, de cuyo desarrollo se informó a la Junta de Extremadura, se lograron "pruebas suficientes como para llegar a señalar y denunciar a un trabajador de la ITV, tras lo que el día 9 se le detuvo y la Junta incoó un expediente administrativo y le suspendió de empleo y sueldo".