Las actuaciones en infraestructuras, la investigación y los incentivos a empresas serán los principales ejes de generación de empleo del Plan Especial de Dinamización Económica y Empleo para Extremadura que el pasado sábado presentó en Mérida el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.

Según ha podido conocer EL PERIODICO, el objetivo del Ejecutivo central y la Junta de Extremadura es la realización de inversiones estratégicas en estas áreas para garantizar un empleo de calidad y estable en la comunidad autónoma.

A pesar de la falta de concreción inicial del proyecto, la idea de Zapatero y del presidente extremeño, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, ha sido la de diseñar un plan de inversiones en el que la generación de empleo tenga una dependencia directa de las acciones que se vayan emprendiendo. "La intención no es destinar ayudas para crear empleo temporal. El fin es un proyecto global que rentabilice cada inversión con nuevos yacimientos de empleo", aseguran fuentes del PSOE extremeño.

Tal y como se anunció, el plan se marca un periodo de actuación de diez años y contempla una partida de inversiones de 3.400 millones de euros. A pesar de los datos aportados, la negociación del proyecto mantiene abiertos "ciertos flecos" entre ambas administraciones.

El Plan Extremadura vertebra su modelo de desarrollo en la interrelación en aquellas inversiones que se lleven a cabo en áreas como las infraestructuras o incentivos empresariales, por cuanto las comunicaciones son una vía necesaria para la competitividad y comercialización empresarial. En ese sentido, la Junta destaca la importancia de las mejoras en el ferrocarril convencional, las redes de transportes de mercancías o las nuevas autovías.

De otro lado, la investigación y el desarrollo tecnológico es calificado como una "apuesta de futuro" con la que el Gobierno central pretende contribuir y lograr un desarrollo equilibrado de España.

NUEVAS REACCIONES Cuarenta y ocho horas después del anuncio de Zapatero, el plan sigue suscitando reacciones. Ayer fue el turno para Extremadura Unida. El secretario general del partido regionalista, Pedro Cañada, calificó de "tomadura de pelo" la visita del presidente del Gobierno para "prometer cosas que se vienen prometiendo desde hace 15 años", como la autovía Cáceres-Trujillo.

Cañada comparó la visita de Rodríguez Zapatero a Extremadura con la película de José Luis Berlanga "Bienvenido Mister Marshall", por prometer "a muy largo plazo y sin concretar cómo y cuánto cada año se van a distribuir esos 3.400 millones de euros que ha anunciado para los próximo 10 años".

Una visión muy distinta han ofrecido Los Verdes. El portavoz en Extremadura, Felipe Martín, considera el compromiso del Gobierno central "importante y permaneceremos vigilantes, al igual que lo estará la propia Junta y el conjunto de la ciudadanía extremeña en que se lleve a cabo de forma efectiva".

Por su parte, socialistas y populares mantuvieron ayer el cruce de acusaciones en torno a este asunto. Mientras el PP calificó la visita de Zapatero a la región como un encuentro improvisado "camino de Punta Umbría" en el que no se concretó ninguna de las inversiones anunciadas, la Junta de Extremadura aseguró que el ex presidente José María Aznar hizo promesas "vacías" con respecto a la región.