Arroyo de San Serván está hoy de luto. Esta localidad pacense, cercana a Mérida, ha perdido a uno de sus vecinos en un accidente de tráfico. Francisco Macías Blanco, Paco, que es como lo conocía todo el mundo en el pueblo, murió ayer a los 53 años de edad en la pista de la Confederación Hidrográfica del Guadiana que une Arroyo con Torremayor, a unos dos kilómetros del conocido badén del mismo nombre que esta última localidad, junto al kilómetro 354 de la autovía A-5.

Francisco, que deja mujer y cuatro hijos, era agricultor. Cerca del lugar del accidente tenía su finca, en la que cultivaba fruta, lo que hace pensar que venía de su propia parcela.

Sobre las once y cuarenta minutos, cuando volvía caminando hacia su casa, se cruzó con un amigo que circulaba en una furgoneta, una Peugeot Partner. Se saludaron y el vehículo se detuvo en la cuneta para intercambiar unas pocas palabras.

Un camión frigorífico que circulaba por la vía chocó por detrás con la furgoneta. Al parecer el peatón estaba apoyado en la ventanilla y del golpe salió despedido. Todo indica que un fuerte golpe en la cabeza causó su muerte.

COLISION Según confirmaron a este diario fuentes de la Guardia Civil de Tráfico, ninguno de los ocupantes de los vehículos implicados en el choque, que dieron negativo en el control de alcoholemia, sufrió heridas. Por el momento se desconocen los motivos por el que el camión no esquivó a la furgoneta para evitar la colisión, puesto que se produjo en una zona recta de la vía.

La noticia cayó como un jarro de agua fría en este pequeño municipio pacense, puesto que se trata de una persona muy conocida entre sus vecinos, según indicó el alcalde, Juan Moreno, en declaraciones a este diario. Ayer mismo estaban programados algunos actos relacionados con las fiestas patronales del pueblo, que se celebran, como en muchos otros municipios de la provincia, los días 13,14 y 15 de agosto. En concreto, estaba previsto el traslado hasta el pueblo de la imagen de la Virgen de Perales desde su ermita. Este y otros actos fueron suspendidos como muestra de duelo por lo ocurrido.