Este jueves se cumple una semana desde que efectivos de la Guardia Civil procedieran a la detención de Eugenio D. H., por la desaparición de la vecina de Monesterio, Manuela Chavero. Desde el pasado domingo, el arrestado ha sido conducido diariamente hasta su vivienda, en la calle Cerezo, nº 28 de la localidad, con el objetivo de reconstruir las últimas horas con vida de Manuela. Si bien, todas las actuaciones se han venido desarrollando en la vivienda de Eugenio, lugar en el que previsiblemente tuvo lugar el fatal desenlace, este miércoles, el escenario de las investigaciones se ha trasladado hasta una segunda finca propiedad del detenido, a unos 12 kilómetros de la localidad, a la que se accede por el camino de El Real de la Jara.

Esta segunda propiedad del detenido se encuentra a más de 15 de kilómetros de la finca en la que el pasado viernes se hallaron los restos óseos sobre los que trabaja el Instituto de Medicina Legal de Badajoz, para determinar si se corresponden con la víctima. Estas últimas actuaciones, en las que también ha estado presente el arrestado, dan continuidad a la minuciosa búsqueda de indicios que las unidades de la UCO y Criminalística vienen realizando para esclarecer el caso.

El detenido, según informó Canal Extremadura Televisión, habría abandonado las dependencias de la Guardia Civil de Zafra, durante la tarde de este miércoles, para ser trasladado al centro penitenciario de Badajoz. Eugenio D. H., pasó a disposición judicial la tarde del pasado domingo, tras prestar declaración en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Zafra. Se le imputan los delitos de detención ilegal y homicidio, decretándose prisión provisional, comunicada y sin fianza.

Comunicado Por su parte, Emilia Chavero, hermana de Manuela, en un comunicado, ha vuelto a «agradecer el gran trabajo realizado» por los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, y de manera «especial» a la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil. Además de por su trabajo, Emilia agradece el «excepcional cariño, respeto y agrado» con el que han tratado siempre a la familia, así como la «confianza» y «única esperanza» para la resolución de este caso. Del mismo modo hacen reconocimiento público a sus largas horas de trabajo, profesionalidad y esfuerzo: «Vuestro trabajo ha sido impecable. Nos habéis conseguido dar esa respuesta que tanto necesitábamos saber». «Ahora queda que se haga justicia», concluye el comunicado que firma Emilia Chavero.