Renfe iniciará a primeros del marzo las obras para la construcción de su base de mantenimiento en Badajoz, instalaciones que permitirán realizar estas tareas de primer nivel en los trenes que prestan servicio en Extremadura.

La nueva base incluirá los elementos necesarios para que sea compatible en el futuro con el mantenimiento de trenes eléctricos, según ha expresado Renfe.

La puesta en servicio de estas nuevas instalaciones acortará los tiempos de reparación y el número de desplazamientos que actualmente deben realizar los trenes de Extremadura para este tipo de mantenimiento.

Las obras comenzarán una vez finalicen, en los próximos días, los últimos trámites administrativos en curso.

Renfe adjudicó la construcción de estas nuevas instalaciones a la unión temporal de empresas Gévora-Durantia por un importe de más de 1,4 millones de euros, y tras este trámite se han llevado a cabo todos los trabajos previos y habituales al inicio de una obra de estas características.

Estas tareas previas incluyen la toma de datos, replanteo o mediciones en la parcela propiedad de Renfe ubicada en la calle Blas García Molina.

También se concluyó, el pasado noviembre, la redacción del proyecto constructivo, que como es preceptivo se entregó al Ayuntamiento de Badajoz para la obtención de la correspondiente licencia de obras e instalaciones.

La base de mantenimiento de Badajoz acogerá revisiones y reparaciones de primer nivel de los trenes que circulan por la comunidad extremeña.

Con ello se acortarán los tiempos y se reducirá de manera considerable el número de desplazamientos del material rodante, que actualmente se debe realizar a los talleres que la compañía tiene en Madrid, con el "consiguiente ahorro de tiempo y aumento en la rapidez y eficiencia en las actuaciones de mantenimiento", se ha explicado.

Las obras incluyen la demolición de la nave actual y la construcción de una nueva para el mantenimiento de trenes, dotada de dos vías interiores de ancho ibérico, vías de acceso y urbanización, entre otros.