Los extremeños cada vez son más solidarios y los últimos datos sobre donantes de médula ósea lo confirman. El pasado mes de septiembre se registraron 170 nuevos voluntarios en la región frente a los 66 del mismo mes en 2015, lo que supone casi tres veces más. Detrás de este incremento hay, entre otros, un nombre propio, el de Pablo Ráez, un joven de Málaga aquejado de leucemia que el pasado verano lanzó una especie de campaña a través de sus redes sociales para aumentar el censo de donación de médula ósea y lo está consiguiendo.

Ráez, contando día a día su enfermerdad a través de Facebook e Instagram, ha logrado despertar la solidaridad de muchos españoles. En su provincia el incremento de donantes ha superado todas las expectativas, pero su efecto llamada se está repartiendo por todas las comunidades. «Sin duda el aumento de septiembre tiene que ver con Pablo, gracias a él estamos recibiendo un aluvión de llamadas de personas que quieren hacerse donantes y esto se seguirá notando en los próximos meses. Nosotros no podemos promocionar la donación, pero hay muchos Pablos, muchas Anas, muchos Carlos que también necesitan un trasplante de médula», explica Juande Montero, donante efectivo y uno de los fundadores de la Asociación para la Donación de Médula Ósea en Extremadura (Admo).

¿NUEVO RÉCORD?/ Así y como viene ocurriendo en los últimos años, este colectivo prevé que en el 2016 se vuelva a batir el récord de donantes. El año 2015 se registraron un total de 868 nuevos voluntarios y a cierre de septiembre del 2016 ya van 720 donantes nuevos. En total, desde que existe el registro en la comunidad -a principios de los años 90- suman hasta el mes pasado más de 7.500 donantes en la región.

Sin embargo, siempre es necesario seguir sumando porque para poder encontrar la sangre compatible con un solo enfermo se necesita buscar entre 40.000 y 50.000 donantes potenciales. «Hacer una donación efectiva es como buscar una aguja en un pajar, por eso cuantos más donantes potenciales seamos, cuantas más agujas tenga el pajar, más factible será encontrar a la persona adecuada, el donante efectivo», explica Macías. Y es que encontrar un voluntario compatible no es nada sencillo, solo el 30% de los enfermos lo encuentra en su familia, el 70% restante tiene que buscarlo fuera.

CONVIVIR/ «Compatible quiere decir que las células del donante y del paciente se parecen tanto que podrían convivir juntos en el organismo del receptor». Cuanto más compatible se sea menos riesgos existen de que el enfermo rechace la médula trasplantada. Eso se mide a través de un exhaustivo análisis de la sangre, «es como el DNI de la sangre, si de 10 números coinciden 9 el voluntario pasa de ser donante potencial a efectivo porque hay un enfermo con el que es compatible». Aunque a veces se crea lo contrario, encontrar esa compatibilidad es muy complicado, hay muchos donantes registrados que nunca han hecho efectiva la donación.Por eso el sistema de donaciones fuciona a nivel mundial en base a tres bancos internacionales --uno europeo, otro asiático y otro americano-- que constantemente están cruzando los datos sanguíneos de los enfermos con los de los voluntarios.

En Extremadura, como en el resto de autonomías, el número de nuevos donantes crece a un ritmo dispar, pero no suele ser frecuente que se registren más de cien voluntarios en un mes, la media suele estar entre 60, 70 o 80 personas mensualmente. El número fluctúa y depende fundamentalmente de la concienciación de la población. «Hay veces que sale a la luz el caso de un niño que necesita un trasplante de médula en un pueblo y comienza a desplegarse una red de solidaridad en su entorno que hace crecer las cifras», señala Montero.

La información es clave para lograr aumentar los registros. «La donación de médula ósea asusta por su nombre porque la gente lo suele confundir con la médula espinal y siempre hemos tenido que luchar contra eso» a base de ofrecer muchas charlas e información por toda Extremadura. Pero nada tiene que ver en realidad con la médula espinal, ésta es un haz de nervios que recorre el interior de la columna vertebral mientras la médula ósea es un tejido esponjoso que se encuentra en el interior de los huesos. «Es el tuétano, y la sangre que lo baña es muy abundante en células progenitoras o células madre que producen la mayor parte de las células sanguíneas -incluidos los glóbulos blancos (leucocitos), los glóbulos rojos (hematíes) y las plaquetas (trombocitos)-».

Esas células madre son el único recurso para la curación de determinados enfermos de leucemia y otras enfermedades de la sangre, la única esperanza de vida de muchas personas. La médula ósea junto con la sangre de cordón umbilical y la sangre periférica es una de las tres fuentes de células madre sanguíneas.

Extraer ese tejido o sangre del hueso de un donante cuando se localiza un enfermo con determinadas características genéticas similares para realizarle lo que se conoce como trasplante alogénico -de un donante que no es familiar- es un proceso que ha cambiado mucho con los años. «Hace 20 años había que hacerlo mediante una intervención quirúrgica, hoy en día es una donación muy sencilla». Cuando se va a extraer la sangre periférica el proceso se denomina aféresis, se suele realizar en el brazo del donante y a través de una máquina que no requiere anestesia para el donante. En el caso de extracción de la médula ósea sí se requiere anestesia general o epidural. El proceso consiste en la punción del hueso de la cadera y no dura más de dos horas. La estancia total en el hospital es de 24 horas y la médula extraída al donante sano se regenera en pocos días sin problemas. A los seis meses el mismo donante podría realizar una nueva donación efectiva.

EL INFANTA, DE REFERENCIA/ En Extremadura el centro de referencia para los donantes está en el Infanta Cristina de Badajoz. Este hospital se encarga de recibir la sangre de los donantes potenciales y analizar exhausitivamente las muestras para determinar el DNI de cada sangre. Esos datos son los que se mandan a la Funcación Josep Carreras encargada del Registro Español de Donantes de Médula Ósea (Redmo).

De momento, en la región no es posible todavía realizar la donanción efectiva, hay que desplazarse al hospital más cercano, en Salamanca, Madrid,... Tampoco se relizan trasplantes de médula ósea en Extremadura, por ahora solo se hace el trasplante autólogo, es decir, el propio enfermo a través de una máquina dona progenitores (células madre) para sí mismo, esos progenitores se congelan para ser transfundidos al propio paciente posteriormente. Este proceso solo se puede realizar en el Hospital San Pedro de Alcántara de Cáceres.

Macías recuerda que aumentar el censo de donantes es vital porque solo 3 de cada diez enfermos lo encuentran entre sus familiares, los siete restantes tienen que buscarlo fuera. Y esa persona compatible de la que depende una vida puede estar en EEUU, en Japón o en Extremadura.