Una opción del móvil desconocida para muchos pero que ayudó a que su supuesto agresor sexual fuera detenido. La joven de 20 años de Puebla de Sancho Pérez víctima de la violencia machista el pasado domingo logró enviar una alerta a su hermano que permitió que este avisara a la Guardia Civil y al 112, que lograron el arresto una hora después en uno de los caminos cercanos al lugar de los hechos.

El suceso ocurrió el pasado domingo sobre las 13.00 horas, justo cuando la localidad celebraba la procesión de su Virgen con motivo de las fiestas locales.

La joven agredida, de 20 años, se había desplazado a la finca familiar a dar de comer al ganado cuando un hombre, de unos 55 años y vecino de Zafra, se acercó a pedirle agua. «Le dijo que quería llenar la botella que llevaba en la bicicleta», explica el alcalde de Puebla de Sancho Pérez, José Agustín Reja Rodríguez. «Entonces empezó la agresión sexual y el forcejeo, pero ella consiguió mandar el mensaje de SOS a su hermano. Cuando a él le llegó el aviso llamó a su móvil, pero ya estaba apagado porque el agresor le golpeó con el aparato en la cabeza».

Lo que recibió concretamente fue un audio de cinco segundos en el que se escuchaba: «Voy a llamar a la Guardia Civil, desgraciado»; dos capturas de pantalla que hizo el teléfono con la cámara delantera y la trasera, y la ubicación de dónde se encontraba su hermana (esta función del móvil se activa en el apartado de ‘Ajustes’ y en ‘Privacidad/ Seguridad/ Funciones avanzadas’; es una herramienta que se incluye en los nuevos sistemas operativos).

El alcalde del municipio subraya que la propia víctima «consiguió quitarse de encima a esta persona, que terminó huyendo, pero gracias a su mensaje pudo detenerse rápidamente».

El juez decretó el ingreso en prisión preventiva hasta que se celebre el juicio.

AYER, MANIFESTACIÓN / Los vecinos de Puebla de Sancho Pérez acudieron ayer a una concentración en la plaza de España convocada por el ayuntamiento para mostrar su repulsa a este tipo de agresiones machistas y para respaldar a la joven de 20 años. Unas 600 personas de todas las edades unieron sus voces en esta manifestación.

Entre los asistentes se encontraba el colectivo Zafra Violeta, que pelea por una sociedad libre de delitos sexuales contra las mujeres.