El debate sobre la reforma de la Ley Orgánica de Calidad de la Educación (LOCE) ya ha comenzado en Extremadura. Administración, sindicatos y padres muestran diferentes puntos de vista sobre el documento presentado esta semana por la ministra de Educación, María Jesús San Segundo, que podrán discutir a partir del próximo 7 de octubre, fecha en la que comenzarán las reuniones del Consejo Escolar de Extremadura. Serán dos meses de debate cuyos resultados se trasladarán al Consejo Escolar del Estado. Todos los sectores implicados coinciden en la importancia de que sea una reforma abierta, aunque no se muestran optimistas en cuanto a que en estos dos meses pueda conseguirse un consenso en algunos temas puntuales.

Entre los principales puntos de la reforma se encuentra el de la enseñanza de las religiones, cuyo objetivo es abordarla desde un punto de vista no confesional. Además, se propone eliminar la Prueba General de Bachillerato --la reválida-- y recuperar una prueba única de acceso a la universidad, eliminar los itinerarios formativos que la ley de calidad había introducido en la ESO y reforzar el aprendizaje de asignaturas como las Matemáticas y el Inglés. Todo esto no se ve de igual forma en Extremadura.

La religión

Es quizá el tema más polémico y el que más confusión ha creado. En el fondo, todo continúa prácticamente como hasta ahora. La reforma mantiene la materia de Religión dentro del currículo general y quienes no la elijan deberán escoger entre varias alternativas. La única diferencia es que Educación pedirá un dictamen al Consejo de Estado sobre si los hijos de las familias que a título individual lo soliciten pueden quedar exentos de cursar la alternativa a la materia confesional.

Todo ello ha recibido numerosas críticas desde varios sectores, aunque, curiosamente, el arzobispo de Mérida-Badajoz, Santiago García Aracil, aseguró ayer que "se está haciendo un problema de algo que no está manifestado como problema", e insistió en que las cosas van a seguir "más o menos" como estaban.

El PP extremeño es el más crítico con todo esto y acusa al Gobierno de perseguir una "escuela laica y única, impregnada de un fuerte componente ideológico". También se han mostrado críticos --menos-- los sindicatos CSI-CSIF, PIDE y ANPE.

Desde CSI-CSIF consideran "absurdo que la Religión parezca el eje vertebrador del sistema educativo y todo para que al final quede más o menos como estaba". Por su parte, PIDE entiende que este punto "no está claro del todo y no ha quedado definido qué es lo que pasará con esta materia", mientras que ANPE no desea que la asignatura se imparta fuera del horario escolar.

La Federación Regional de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos (Freapa), por el contrario, insiste en que "el Gobierno se ha quedado corto en este tema". A pesar de que todavía no han discutido el documento de Educación en profundidad, el presidente de la Freapa, Rafael Delgado, recuerda que "el movimiento de padres propugna una escuela laica, pero que respete a todas las religiones, sacando la Religión del horario lectivo". Aquí, Delgado es tajante: "Será difícil encontrar un consenso".

Exámenes e itinerarios

El otro punto conflictivo es el de la evaluación continua. La reforma la recupera, por lo que desaparece la obligatoriedad de repetir curso en la ESO con tres suspensos. La promoción de curso queda en manos de los profesores. Además, una prueba única dará acceso a la universidad, aunque no será necesario aprobarla para conseguir el título de bachiller.

CSI-CSIF cree que la reforma elimina "una de las cosas más positivas", los itinerarios, y rechaza la supresión de la prueba general de Bachillerato, así como que "repongan la promoción automática, ya que esto supondrá que el alumno no se esfuerce en superarse".

Para PIDE todas estas reformas se han quedado "a medio camino de nada" y entiende que "es sólo un parcheo con el que la incertidumbre volverá otra vez a las aulas". Por su parte ANPE señala que la supresión de itinerarios puede crear problemas en la organización escolar, ya que "el establecimiento de diferentes itinerarios formativos en el segundo ciclo de ESO sirve para que los alumnos, en función de sus actitudes e intereses, puedan diseñar libremente su futuro profesional o académico".

En cuanto a los padres, la Freapa cree "correcta" la propuesta del Gobierno de suprimir los itinerarios e incide en que "todo esto se se resuelve con la evaluación continua".

Dinero y profesores

En lo que sí parecen coincidir todos los sindicatos, incluidos UGT y CCOO, es en que el Ministerio de Educación debería haber echo una apuesta más fuerte por la financiación. Y todos, a excepción de la Freapa, creen que en esta reforma se ha olvidado a los profesores.