José Larrasa, director de sus laboratorios, que se sitúan "los primeros a nivel europeo en genotipado animal". Su proyecto empezó en 2002, cuando terminaba el doctorado en Patología Infecciosa, y se debatía entre irse a Escocia y hacer un posdoctorado o montar una empresa. Finalmente, decidió mezclar ambas inquietudes e investigar para su propia empresa. Compró todo lo necesario y empezó solo en un local familiar. Después se unió su primo, también veterinario. Trabajaban sin cobrar. Su primer salario no llegó hasta 2003 y consistió en 300 euros. En 2007, y gracias a los créditos ICO, pudieron montar el primer laboratorio y trasladarse al edificio en el que se encuentran ahora. "Somos una empresa más o menos familiar". Con la Uex tienen una subcontrata, un acuerdo de colaboración por el que la empresa les paga por sus servicios. "Nos sentimos miembros de la comunidad universitaria, puesto que además nos formamos con ellos", asevera.

La base de la empresa se centra en la apuesta por I+D (investigación y desarrollo). No solo trabajan en España y Europa, ahora están expandiéndose por otros continentes. Han empezado a colaborar con importantes empresas como por ejemplo con la brasileña JBS (primera productora y distribuidora de carne del mundo). Sus servicios pueden ser solicitados por cualquiera y se realizan de forma personalizada. Utilizan tecnología de análisis genómico de alto rendimiento, algo exclusivo en Europa, y por lo que fueron tildados de locos: "Tenemos proyectos de futuro para al menos unos 10 o 15 años de investigación".