La productora Estudios y Proyectos Audiovisuales de Toledo y Centro, vinculada al grupo Econisa, realiza en la actualidad una serie de espacios de autopromoción para Canal Extremadura Televisión gracias a un contrato que fue adjudicado el 21 de enero de este año. En esa fecha, la empresa estaba presidida por el entonces presidente del PSOE extremeño y expresidente de la Asamblea autonómica, Federico Suárez, quien ya se había retirado de la primera fila política.

Aunque esta adjudicación no incurre en ninguna ilegalidad, el PP señaló ayer que demuestra que el Gobierno extremeño sí adjudicó contratos a Econisa durante el tiempo que Suárez estuvo vinculado a la empresa, poniendo así en entredicho la versión ofrecida por la Junta, que negó que así fuera. Al mismo tiempo, con ello se demuestran las "tramas de amiguismo y favoritismo de la Junta hacia empresas dirigidas por exaltos cargos", señaló ayer el diputado del PP Luis Alfonso Hernández Carrón.

Según el Registro Mercantil, Suárez estuvo al frente de esta productora antes de que ocupara la presidencia de Econisa a finales del mes de febrero. En concreto, lo hizo entre el 13 de diciembre del 2007 y el 20 de junio del 2008, fechas entre las que le fue adjudicado el contrato con Canal Extremadura. El propio Suárez, que ayer no respondió a las llamadas de este diario, ha insistido en anteriores ocasiones en que no incurría en ninguna incompatibilidad al presidir cualquiera de estas empresas, y que las abandonó en abril, un mes antes de que entrara en vigor la nueva Ley de Contratos del Sector Público. Con ella, Suárez hubiera incurrido en una incompatibilidad, no por sus anteriores cargos, sino por estar casado con Leonor Flores, pero no por ser consejera, sino por su calidad de funcionaria.

No obstante, desde el PP extremeño quieren asegurarse de que la adjudicación fue legal y para ello se ha solicitado la comparecencia en la Asamblea del director de Canal Extremadura Televisión, Pablo Sánchez. También esperan que responda a los motivos por los que la propia empresa adjudicataria rescindió el contrato el pasado mes de mayo.

El canal autonómico responde, por un lado, que no pudo aceptar la renuncia de la productora, al menos hasta que se resuelva el nuevo concurso convocado para para encontrar una empresa que la releve. Por otro, Canal Extremadura defiende el proceso de adjudicación de un concurso que se desarrolló cumpliendo "todos los requisitos de publicidad y concurrencia que estipula la Ley", señala en un comunicado.