Un grupo de científicos de la Universidad de Extremadura ha creado un sistema tecnológico llamado mammodiag con el que se detectará las microcalcificaciones que dan lugar a algunos tipos de cáncer de mama cuando se convierten en tumores malignos.

El proyecto surgió hace casi cinco años, según informa Europa Press, cuando después de realizar un trabajo de inteligencia artificial para la universidad, el catedrático Francisco Javier López Aligé, alentado por una compañero, decidió unirse a otros dos especialistas en radiología y oncología para aplicar su teoría a las mamografías.

UTILIDAD El radiólogo y profesor de la Uex, Alberto Pobeda, destaca la utilidad del sistema ya que "detectar esas calcificaciones a tiempo es muy importante", y destacó que "muchas veces esas calcificaciones se producen cuando el tumor no se ha desarrollado, no se ha hecho invasor".

Según estos científicos, el objetivo principal consiste en llegar a descubrir lo que en las actuales mamografías no llega a apreciarse. "A veces, es difícil que lo vea el ojo humano, y hay que dedicar mucho tiempo y lupa para ver esas calcificaciones, por ello hemos desarrollado un sistema que las detecta precozmente con el valor clínico que supone el facilitar al radiólogo la búsqueda de esas calcificaciones", explica.

DIGITALES Además de ganar tiempo de cara a un diagnóstico precoz de estos casos, el mammodiag permite detectarlo antes, por lo que el tratamiento y las operaciones "serían menos mutilantes y menos agresivas", explica el oncólogo del Hospital Infanta Cristina de Badajoz, Fernando García Urra.

El sistema se ha probado ya y funciona, aunque queda algo por mejorar, "no mucho". En lo que se refiere a la detección de microcalcificaciones García Urra asegura que "las detecta todas". "En lo que estamos ahora es en la fase de clasificación, lo que nos dirá si son benignas o malignas", apunta.

TRATAMIENTO La tecnología que hace posible este proyecto está realizada gracias al equipo formado por la profesora titular de Electrónica María Isabel Acevedo y el catedrático Francisco Javier López Aligé, que le han asignado a un programa toda la potencia y capacidad de los sistemas modernos de tratamiento de imagen.

"Eso y un par de inspiraciones que nos ha pillado trabajando es lo que nos ha llevado a un sistema que es capaz de detectar calcificaciones y no sólo eso sino detectar otro tipo de imágenes que puedan llevar a confusión", argumentó el catedrático López Aligé.

Mammodiag es capaz de detectar una calcificación de hasta la décima de milímetro, lo máximo que permiten las actuales mamografías. Ahora queda clasificar las microcalcificaciones y asociar a cada tipo una característica médica, si es maligno de qué tipo o si es benigno.