En lo que va de año, al menos seis personas han sido atropelladas en la región, resultando todas con heridas de consideración. Todos fueron varones, dos niños (uno en Malpartida de Plasencia arrollado por un tractor y otro en San Vicente de Alcántara) y el resto, mayores de 70 años. Una de las víctimas, de Cáceres y de 88 años, murió días después del accidente en el Hospital San Pedro de Alcántara.

A lo largo del pasado año tamibén se produjeron en la región varios atropellos graves, consecuencia de las infracciones cometidas tanto por conductores como por peatones.

El más grave tuvo lugar en Mérida en el mes de abril, cuando un hombre de 78 años fue atropellado por un turismo en la Avenida Reina Sofía. El primero cruzaba por un lugar indebido y el conductor del vehículo, que permanece en prisión, participaba en una carrera ilegal circulando a 130 kilómetros por hora en una vía limitada a 50. Una semana más tarde fallecía por la misma causa otro hombre en Cilleros. Los primeros indicios de la investigación señalaban que se trataba de una imprudencia del peatón, que circulaba por el medio de la vía.

Pero sin duda, el ´punto negro´ de los atropellos en la región es la N-110 entre Navaconcejo y Tornavacas, en la que se han producido cuatro accidentes mortales en poco más de un año.