Las ventas de las estaciones de servicio extremeñas bajaron el pasado julio un 20% en relación a las obtenidas en el mismo periodo de 2012, un descenso que afecta en mayor medida a las del entorno rural, según datos de la Asociación Regional de Estaciones de Servicio de Extremadura (Aresex), recogidos ayer por la agencia Efe. El presidente de la asociación, Casto Bravo, aseguró a Efe que las cifras son "catastróficas", sobre todo si se comparan con las obtenidas en julio de 2011, donde se obtuvieron unas ventas un 40% superiores a las logradas el mes pasado.

Aunque la caída de ventas se produce en todas las estaciones de servicio extremeñas, esta situación está afectando sobre todo a las gasolineras de los entornos rurales, pues los descensos "se notan un poco menos" en las "pocas" grandes ciudades que tiene Extremadura, añadió.

"En julio no ha habido prácticamente movimiento en Extremadura; así nos lo han transmitido también los hoteleros y hosteleros; aunque haya zonas como Mérida -por el Festival de Teatro Clásico- o Cáceres que puedan tener más actividad", manifestó Bravo. Sin embargo, ese movimiento que se ha echado de menos en julio si se está produciendo en agosto, como demuestra el ligero "repunte" en ventas logrado por las estaciones en los primeros días de este mes.