Se imaginan que el destino que tenían previsto para el viaje de su vida cambia de la noche a la mañana y se alteran los planes? Este es el símil que muchos padres con hijos con Síndrome de Down me han expuesto en numerosas ocasiones para confesarme cómo se sintieron cuando conocieron que su hijo sufría una alteración genética producida por la presencia de un cromosoma extra en la pareja cromosómica 21.

Es la comparación que han utilizado también para explicarme cómo lo afrontaron. Tras aceptar la situación y adaptarse a una nueva realidad, iniciaron un camino que, según me cuentan, ha estado lleno de aventuras y en el que ha sido su hijo quien, en muchas ocasiones, les ha guiado por esta travesía que, en definitiva, es la vida.

En este Día Mundial del Síndrome de Down, desde esta tribuna he de trasladarles mi admiración a todos ellos, a las personas con Síndrome de Down y a sus familias por enseñarnos a vivir, a disfrutar y a no perder la sonrisa. Y quiero manifestarles también mi reconocimiento por haberse convertido en ejemplos de superación, de capacidad, de valía, en promotoras de bienestar, como bien ha considerado Naciones Unidas.

En este 'viaje', el Gobierno de Extremadura y las asociaciones de familiares hemos ido juntos de la mano y hemos dado grandes saltos, llegando a lugares inesperados, consiguiendo que las personas con este trastorno genético, otrora marginadas, gocen de una vida normalizada en la infancia y adolescencia, llegando a trabajar y vivir de forma autónoma en la edad adulta.

Nuestro viaje se ha visto alterado en los últimos años por la terrible crisis económica que estamos sufriendo. Desde el gobierno se ha trabajado incansablemente para no variar nuestro destino, que es la plena inclusión de las personas con Síndrome de Down.

Esta ha sido una carrera en la que hemos superado numerosos obstáculos, pero no todos. Por ello, desde la Consejería de Salud y Política Social seguimos trabajando en por la plena inclusión de las personas con Síndrome de Down y de su participación activa en la sociedad, sin olvidar el desarrollo de programas integrales dirigidos a ellas.

XEN NUESTRAx región residen cerca de 1.150 personas con Síndrome de Down, a disposición de las cuales ponemos el Marco de Atención a la Discapacidad de Extremadura (Madex), que este año cuenta con una dotación de más de 20,5 millones de euros. A través de él se prestan a ellos, y a las personas con discapacidad, servicios de atención temprana, de habilitación funcional, centros de día, viviendas tuteladas, residencias y centro ocupacionales, todo ello con el fin de ofrecerles una atención integral que garantice su calidad de vida y su integración social.

A esto último contribuyen también las subvenciones que concede el Sepad para financiar programas que incidan en la normalización de las personas con discapacidad, incluidas aquellas que presentan Síndrome de Down.

Gracias a estas ayudas --que en 2013 alcanzan los 980.000 euros-- estamos trabajando en su inserción social y laboral, contribuyendo por tanto a su autonomía personal, e incidiendo en la sensibilización para que los ciudadanos vean a las personas con discapacidad, y con Síndrome de Down, como iguales.

En el ámbito de la salud quisiera mencionarles el Plan de Atención Dental a Discapacitados (Paddi), que actúa sobre una población de unas 17.000 personas para prestarles una asistencia dental gratuita.

Todos los pasos que hemos caminado son, sin duda, fruto del esfuerzo y la lucha constante de las familias, que han contado con las asociaciones y la Administración pública como compañeros para, entre todos, contribuir y facilitar, ni más ni menos, el desarrollo como personas de quienes presentan esta alteración genética.

Desde aquí, os brindo mi reconocimiento y mi apoyo para seguir compartiendo con todos vosotros este 'viaje'.