Cinco personas, dos de ellas soldados, murieron en las últimas 24 horas en una serie de ataques armados en la región sur de Tailandia lastrada por el conflicto separatista musulmán, informó hoy la policía.

Los militares -encargados de escoltar a los monjes budistas que cada mañana piden limosna a la población- fueron asesinados a machetazos y sus cuerpos sin vida se hallaron en la provincia de Yala.

Allí también se encontraron los cadáveres de dos civiles sin identificar.

Uno de ellos llevaba una camiseta de un regimiento local del Ejército, y otro llevaba uniforme de una escuela coránica, según fuentes policiales.

ATAQUES CASI DIARIOS

Además, un supuesto guerrillero falleció anoche tras un tiroteo contra las tropas gubernamentales en la vecina provincia de Pattani, que dejó heridos a un soldado y un niño de 13 años alcanzado por una bala perdida.

Los ataques con armas ligeras, asesinatos y explosivos se suceden casi a diario en Pattani, Narathiwat y Yala pese al despliegue de 31.000 miembros de las fuerzas de seguridad y de la declaración del estado de excepción.

Casi 4.200 personas han muerto a causa de la violencia en el sur de Tailandia desde que el movimiento separatista islámico reanudó la lucha armada en enero de 2004.

La guerrilla denuncia la discriminación que sufre por parte de la mayoría budista del país y exigen la creación de un Estado islámico que integre las tres provincias de mayoría musulmana, que formaban el antiguo sultanato de Pattani cuando fueron anexionadas hace un siglo por el Reino de Siam.