Las autoridades de Arabia Saudí han arrestado a tres miembros de la familia real que presuntamente conspiraban para derrocar al rey Salman y al hijo que designó como sucesor, el príncipe heredero Mohammed bin Salman, según ha informado la agencia Reuters.

Los guardias de la corte real detuvieron al príncipe Ahmed bin Abdulaziz al Saud, el hermano pequeño del rey Salman, a uno de sus sobrinos, el príncipe Mohamed bin Nayef, y a su hermanastro Nawaz. Los tres están acusados de traición. El primero fue arrestado en su casa ayer y los otros dos cuando se encontraban en un campo privado en el desierto.

Riad no se ha pronunciado al respecto, pero una fuente de la región ha indicado que Bin Salman, conocido como MBS, «los acusa de mantener contactos con poderes extranjeros, incluidos los americanos y otros, para dar un golpe de Estado».

«Con estos arrestos, MBS consolida su control total del poder», ha indicado la fuente, que opina que el príncipe heredero ya no tiene rivales que desafíen su futuro acceso al trono saudí.

Otra fuente ha señalado que los tres príncipes arrestados están acusados de traición y que habrían estado debatiendo un golpe con el apoyo de tribus saudís poderosas.

El ‘caso Khashoggi’ / Mohamed bin Salman, que de facto es quien gobierna Arabia Saudí, gran aliado de Estados Unidos y principal exportador de petróleo del mundo, ha consolidado su poder con mano de hierro desde que su primo Mohamed bin Nayef fue desplazado como heredero al trono en un golpe de palacio en el 2017. Un año después, muchos miembros de la familia real fueron arrestados en una caza de brujas anticorrupción.

El príncipe heredero ha llenado de desconfianza y resentimiento a una buena parte de la familia real, incluidas algunas ramas prominentes, por su autoritarismo y por el asesinato, en el 2018, del destacado periodista saudí Jamal Khashoggi, descuartizado por agentes saudís en el consulado de Arabia Saudí en Estambul.

Estas líneas de la familia real quieren reemplazar a MBS por el príncipe Ahmed, el único hermano de padre y madre del rey Salman que está vivo. Su figura podría tener la aprobación de una gran parte de los miembros de la monarquía, el aparato de seguridad y algunos poderes occidentales.

No obstante, fuentes diplomáticas extranjeras y miembros de la familia real saudí indican que es muy poco probable que se produzcan cambios de este tipo mientras el rey Salman, de 84 años, esté vivo. Salman nunca querrá ponerse en contra de su hijo favorito, a quien ha delegado la mayoría de las responsabilidades de gobierno.

Críticas del príncipe Ahmed / El príncipe Ahmed ha mantenido una posición muy discreta desde que volvió a Riad en octubre del 2018, tras estar fuera de Arabia Saudí y haber criticado algunas posturas del régimen actual.

Ahmed fue una de las tres personas del Consejo de la Lealtad, integrado por destacados miembros de la familia real Al Saud que se opuso a que Mohamed bin Salman fuera nombrado heredero en el 2017. Respecto a Mohamed bin Nayef, sus movimientos se han restringido y controlado desde hace tres años, según fuentes de seguridad saudís.

Fuerte tensión con Irán / Las últimas detenciones se producen en un momento de fuerte tensión con su gran rival en la región, Irán, y cuando MBS está implementando ambiciosas reformas sociales y económicas, incluida una oferta pública inicial del gigante petrolero Saudi Aramco en la bolsa nacional en diciembre pasado. Arabia Saudí preside actualmente el Grupo de las 20 principales economías.

El príncipe Mohamed ha sido alabado en casa por aliviar algunas restricciones sociales y abrir la economía. Pero ha recibido muchas críticas a nivel internacional por la guerra devastadora en Yemen, en la que lucha sin miramientos contra los rebeldes hutís respaldados por Irán, por el asesinato de Khashoggi y la detención de activistas por los derechos de las mujeres como parte de una ofensiva contra la disidencia.