La ultraderecha de EEUU, con argumentos empleados para invadir Irak --posesión de armas de destrucción masiva y albergar a terroristas--, se empeña ahora en promover un cambio de régimen en Irán e imponer la democracia. El 9 de julio los sectores reformistas han convocado una huelga general que la Administración de Bush interpreta como un primer paso para ver cumplidas sus aspiraciones.
EL APOYO DE LOS AYATOLAS
AL TERRORISMO GLOBAL
Escribía Michael Ledeen, del ultraconservador American Enterprise Institute, en las páginas de The Wall Street Journal : "El apoyo de Irak al terrorismo es una fruslería comparado con las actividades de Irán. Si nos tomamos en serio lo de ganar la guerra contra los señores del terror, el régimen de Teherán debe caer".
Patrocinadores de grupos radicales como Hizbulá y Hamas, los ayatolás afirman haber detenido a varios miembros de Al Qaeda antes de los atentados en Arabia Saudí que causaron 35 muertos. Entre los detenidos se hallan el número dos de Al Qaeda, Ayman al Zauahiri, y un hijo de Bin Laden. Paradójicamente éste sería el mayor éxito de la guerra de Bush contra el terror global.
LAS PRUEBAS SOBRE
EL REARME NUCLEAR IRANI
Basándose en supuestas pruebas aportadas por el oscuro grupo opositor iraní de los Muyahidines del Pueblo, Washington asegura que Irán ha construido dos instalaciones para procesar uranio enriquecido con las que podría fabricar dos bombas nucleares cada año.
Poco importa que los Muyahidines del Pueblo esté incluido en la lista de organizaciones terroristas del Departamento de Estado de EEUU y de la UE.
Todo ello no ha desanimado a la Casa Blanca. Bush mantiene una presión constante sobre Irán y sobre su aliado en temas de energía atómica, Rusia, que recuerda los métodos que la diplomacia preventiva ya empleó para amasar pruebas contra el régimen de Sadam Husein.
EL FLANCO DEBIL IRANI:
UNA REFORMA ESTANCADA
Acosado por EEUU por su supuesto rearme nuclear y por albergar a miembros de Al Qaeda, el presidente iraní, el reformista Mohamed Jatami, afronta en el frente interno una revuelta universitaria que, tras 10 días de protestas, quedó anestesiada el 20 de junio con el arresto de un millar de opositores.
Pero la protesta volverá a estallar el miércoles cuando los estudiantes salgan a la calle para conmemorar el aniversario de la revuelta de 1999 en la que murió un joven tras la irrupción de la policía en el campus.
Las manifestaciones estudiantiles forman parte de un movimiento de trabajadores, intelectuales y clérigos, que reclama la aceleración de una reforma que ha quedado empantanada ante el poder de los sectores conservadores encabezados por el líder supremo, Alí Jamenei.
WASHINGTON MODIFICA SU
ESTRATEGIA HACIA JATAMI
Fuentes de la Administración estadounidense filtraron a The Washington Post que la Casa Blanca había perdido la esperanza de colaborar con Jatami y que había concentrado sus esfuerzos en aproximarse a los movimientos prodemocráticos, que abjuran tanto de los conservadores como de los reformistas.
Fuentes del Departamento de Estado reconocieron a la CNN que el equipo de Bush estaba estudiando planes en los que no se descarta desestabilizar el régimen de los ayatolás.
En una reedición del conflicto de Irak, la diplomacia preventiva de Washington amasa argumentos en contra de Irán. El rearme nuclear, la falta de libertades y el apoyo a los movimientos terroristas son algunos de los incluidos en el breviario estadounidense para el caso de que Washington decida pasar de la diplomacia preventiva a la guerra preventiva. Detrás de todo se esconde el temor de EEUU a que la mayoría shií de Irak caiga bajo la influencia de Irán.
