Un agente de Policía ha sido hallado muerto por disparos este sábado en su granja de Benghazi, convirtiéndose así en la última víctima de una serie de ataques que tienen como objetivos miembros de la Policía, según ha informado un agente de las fuerzas de seguridad.

El cuerpo del coronel Nasser al Maghrabi mostraba evidencias de haber sido golpeado antes de ser disparado. "La familia de Maghrabi encontró su cuerpo tirado entre los olivos de su granja. Tenía dos disparos en sus piernas y uno en su pecho", ha declarado el agente de las fuerzas de seguridad, que no ha querido ser identificado.

"Maghrabi no tenía problemas personales con nadie", ha señalado el agente. "Su muerte parece estar conectada con la serie de ataques contra las fuerzas policiales en Benghazi", ha añadido.

A principios de esta semana, el jefe de la unidad de investigación criminal fue secuestrado por una milicia armada y actualmente sigue en paradero desconocido. En noviembre, el jefe de la Policía de Benghazi, Faraj al Deirsy, fue abatido a tiros delante de su casa. Las comisaría de Policía, por su parte, han sido objetivo de varios ataques con bombas de fabricación casera.