La huelga general convocada hoy por Hizbulá y otros partidos de la oposición libanesa ha comenzado con graves incidentes en Beirut, donde un desconocido arrojó un artefacto explosivo sobre una posición militar, hiriendo a dos soldados y tres civiles. Según la Agencia Nacional de Noticias (ANN), que cita a fuentes policiales, el ataque tuvo lugar en el área de Corniche al Mazra, aunque se desconoce el estado de los heridos.

Partidarios de la oposición, encabezada por el grupo chií Hizbulá, han bloqueado calles y carreteras en Beirut para imponer la huelga decretada por la Confederación General de Trabajadores, cercana a este movimiento, mientras que la situación es de tensa calma en otras regiones. Desde primeras horas de hoy, los manifestantes queman neumáticos y han colocado barricadas en varias calles de Beirut, así como en los pasos que unen los dos sectores de la capital libanesa, como los puentes Salim Salam, el Ring, Bechara el Jury y otros. Asimismo, han cerrado la carretera que conduce al aeropuerto internacional Rafic Hariri de Beirut, donde camiones han vertido arena para formar barreras, a las que han añadido neumáticos incendiados.

Algunos empleados del aeropuerto, que permanecerá cerrado hasta las 15.00 hora local (12.00 GMT), se unieron al paro. Esta mañana ya han sido anulados unos 30 vuelos, según medios locales. Las televisiones libanesas mostraron imágenes de hombres armados y enmascarados, mientras que la policía ha puesto alambres de espinos en una calle que conduce a la residencial del líder druso Walid Yumblat, por temor a un ataque. También se han reforzado las medidas de seguridad alrededor del Banco central del Líbano (BDL) donde se concentrarán los manifestantes, y de los ministerios del Interior y Turismo, frente a la primera institución.

Existe una gran inquietud en el Líbano a que esta manifestación degenere en violencia, al igual que en enero del año pasado, a pesar del refuerzo de las medidas de seguridad. La manifestación pasará por áreas sensibles beirutíes donde a menudo se producen choques entre partidarios de la oposición y la mayoría parlamentaria anti-siria. Además se produce en momentos de mucha tensión tras la decisión del Gobierno libanés de acabar con la red de telecomunicaciones del Hizbulá por ser ilegal. Hizbulá ha llamado a sus partidarios a manifestarse y anunció que mañana su máximo dirigente, Hasan Nasrala, responderá a las medidas adoptadas por el Ejecutivo libanés.