El partido Libertad y Justicia (PLJ), brazo político de los Hermanos Musulmanes, rechazó hoy negociar carteras del nuevo Gobierno egipcio, después de que la Presidencia apuntase que el primer ministro, Hazem al Beblaui, pretendía ofrecérselas.

El miembro del comité legislativo del PLJ Gamal Tag el Din dijo a la televisión estatal que "no van a cooperar con un régimen ilegítimo que ha llegado tras un golpe contra la voluntad del pueblo".

"¿Es posible que el régimen nos pida negociar después de que cometiera una masacre terrible mientras los manifestantes rezaban delante de la Guardia Republicana?", se preguntó El Din, en referencia a la muerte el lunes pasado de al menos 51 personas, la mayoría islamistas.

El asesor de medios de la Presidencia Ahmed el Moslimani destacó anoche en una entrevista televisiva que Al Beblaui tiene previsto ofrecer carteras ministeriales a los Hermanos Musulmanes y al partido salafista Al Nur, según la agencia estatal de noticias Mena.

"Algunas carteras van a ser presentadas al partido Libertad y Justicia y al salafista Al Nur", aseguró El Moslimani, que dijo que "no hay ningún obstáculo" para que esas dos formaciones participen en el gabinete.

El portavoz sostuvo que la profesionalidad será el principal requisito para integrar el nuevo Gobierno, que será "casi amplio" y tendrá entre quince y veinte ministros.

El economista liberal Hazem al Beblaui fue elegido ayer por el presidente interino de Egipto, Adli Mansur, para dirigir el Gobierno durante el periodo de transición, que el Ejército conminó a todos los egipcios a respetar.

Además, El Moslimani señaló que Mansur ha invitado a la reconciliación nacional de la sociedad egipcia mediante una iniciativa que lleva por título "Un solo pueblo".

El plan consiste en una serie de intentos auspiciados por el presidente para poner fin a la tensión social en Egipto durante la primera semana de Ramadán, que comienza hoy.

El ofrecimiento de ministerios a los islamistas y la iniciativa para la reconciliación nacional "tienen el objetivo de cerrar la página del pasado y abrir una nueva página de tolerancia para construir una nueva sociedad", destacó El Moslimani.

Egipto ha comenzado un nuevo proceso de transición tras el golpe de Estado del pasado 3 de julio llevado a cabo por el Ejército, que depuso al presidente Mohamed Mursi y nombró en su lugar y de forma interina a Mansur, entonces jefe del Tribunal Constitucional.