Tailandia, uno de los estados más afectados por el maremoto del pasado 26 de diciembre, se considera un país desarrollado y, a diferencia de Sri Lanka, renuncia a obtener créditos con cargo al Fondo de Ayuda al Desarrollo (FAD) para paliar el desastre. A lo que aspira el Gobierno de Bangkok es a obtener condiciones más ventajosas para el acceso a la UE de algunos de sus productos, una demanda que halló una respuesta positiva en el ministro de Asuntos Exteriores español, Miguel Angel Moratinos.

El dirigente español recaló el martes por la noche en la capital tailandesa, segunda etapa de su maratoniano periplo por los tres países más afectados por el tsunami. Ayer por la mañana, Moratinos se entrevistó con el primer ministro tailandés, Thaksin Sinawatra, y el ministro de Exteriores de ese país, Surakiart Sathirathai. Los dirigentes tailandeses pidieron directamente a su interlocutor español el acceso a la UE de productos pesqueros sin trabas comerciales. "Como el atún o la gamba --dijo el ministro--, a lo que no hay dificultades por parte española".

ESTADO PRAGMATICO Fiel a su reputación de país pragmático, Tailandia también aspira a lograr ventajas comerciales para productos avícolas y a que España apoye las negociaciones comerciales con la UE para lograr un trato preferencial a las exportaciones de pollo. "Tailandia es un caso diferente al de Sri Lanka; no necesita ayuda económica inmediata, sino condiciones económicas y comerciales más favorables", resumió Moratinos.

Bangkok ve con buenos ojos las iniciativas de España tras el tsunami, y ayer mismo se ofreció como sede de la conferencia internacional para impulsar el turismo y promover las inversiones en el sector propuesta por Moratinos el día anterior. El objetivo de la cumbre es revitalizar el sector turístico, gravemente afectado por la catástrofe.

Precisamente, el ministro español aprovechó la oportunidad para agradecer a las autoridades tailandesas el apoyo a la colonia española que estaba de vacaciones en el país y que se vio afectada por el maremoto. De los españoles en paradero desconocido, dos siguen desaparecidos. A medida que pasan los días, tal y como reconoció ayer Moratinos, se desvanecen las pocas esperanzas que quedaban de hallarles.

El ministro viajó luego a Yakarta, la capital de Indonesia, donde se entrevistó con el vicepresidente, Mohamed Jusuf Kalla. Este agradeció a Moratinos la asistencia que está prestando el hospital de campaña de la Agencia Española de Cooperación Internacional en Banda Aceh.