Cuatro niñas murieron hoy al explotar una mina mientras estaban recogiendo agua en un arroyo en la provincia de Helmand, en el sur de Afganistán, informó a Efe una fuente oficial.

La explosión ocurrió hacia las 07.30 de la mañana local (03.00 horas GMT) en la zona de Zabar de Lashkargah, la capital regional, explicó el portavoz del gobernador de Helmand, Omar Zwak.

"Las niñas tenían entre 10 y 12 años y los cuerpos de dos de ellas han quedado hechos pedazos", dijo Zwak.

Las menores habían asistido a una boda en la zona y salieron un momento a recoger agua en un arroyo cercano.

El portavoz del gobernador regional atribuyó el ataque a la insurgencia talibán y aseguró que se ha enviado un equipo para investigarlo.

También en Lashkargah, unos hombres armados atacaron hoy a una mujer, identificada como Islam Bibi, que trabajaba para el departamento de investigación criminal en Helmand.

El asalto causó la muerte de Bibi y heridas a un sobrino que la acompañaba en ese momento.

Las artefactos explosivos improvisados (IED, siglas en inglés) o minas son uno de los métodos preferidos por los talibanes para hostigar a las fuerzas de seguridad afganas e internacionales.

En la práctica, no obstante, provocan un elevado número de víctimas civiles.