Un nuevo terremoto este miércoles de 6,3 de magnitud en la escala Richter ha sacudido Ecuador, según ha informado el Instituto Geofísico, después de que un temblor de 7,8 grados registrado el sábado dejara más de 500 muertos en el país.
Según los datos ofrecidos por el Instituto Geofísico, la potente réplica se ha producido cerca de la costa de Ecuador a una profundidad de 4,77 kilómetros. El órgano oficial ha informado en la última hora de una docena de réplicas más, de entre 3,6 la más reciente y 5 la siguiente al temblor, y ha añadido que desde el sábado se han registrado cerca de 500 nuevos movimientos.
MÁS DE 500 FALLECIDOS
Por el momento no hay información sobre si este nuevo terremoto ha provocado daños adicionales o víctimas a los ya registrados tras el seísmo inicial, que tras el último balance oficial alcanza ya cerca de525 muertos y más de 4.000 heridos, según la Fiscalía de Ecuador. Del total de cuerpos hallados sin vida, 518 han sido identificados y entregados a sus familiares.
Las localidades de Manta, Portoviejo y Pedernales han sido las más afectadas por el seísmo, con un total de 431 muertos. Del total de fallecidos, 11 son extranjeros (tres ciudadanos cubanos, tres colombianos, dos canadienses, un dominicano, un inglés y un irlandés). La Fiscalía ha publicado en su página de Internet una lista con los datos de las víctimas mortales del terremoto ya identificadas.
Horas antes del último balance de muertos de la Fiscalía, el ministro de Defensa ecuatoriano, Ricardo Patiño agradeció lacolaboración internacional y ha explicado que en las tareas de búsqueda y rescate participan 400 efectivos procedentes de un total de ocho países.
GRANDES PÉRDIDAS
El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, ha estimado en unos 3.000 millones de dólares las pérdidas ocasionadas, aunque el ministro de Defensa ha asegurado que esta cantidad es el dinero que hará falta solo para reconstruir la región de Manabí. El presidente ecuatoriano aseguró que los daños ascienden a un 3 % del producto interno bruto y ha explicado que la reconstrucción de las zonas afectadas durará años.
Las autoridades han centrado parte de sus esfuerzos en reabrir lascarreteras que han quedado colapsadas por el seísmo y en restablecer las comunicaciones telefónicas o la electricidad, asegurando que el suministro eléctrico está ya restablecido en la "mayoría" de las zonas afectadas. El ministro ha recordado a las tiendas de alimentación y a los bancos que deben recuperar progresivamente su actividad, con el objetivo de avanzar hacia una normalidad que, en vista de los datos, aún parece lejana.
