El buque que de la Marina estadounidense Trento se alejó ayer de la zona, delante de la costa de Libia, en la que el martes rescató a 40 inmigrantes y localizó una docena de cadáveres. Desde ese día, el buque permanecía inmóvil en la misma área, a la espera de que algún centro de salvamento europeo diese instrucciones para el traslado de los inmigrantes a un puerto seguro. Una autorización que, en la tarde de ayer, todavía no había llegado, dejando en un limbo a los supervivientes del naufragio y al buque que los ha embarcado. Es la misma sitaución en la que se encontró el Aquarius antes del ofrecimiento del Gobierno de Pedro Sánchez.

En el comunicado, las Fuerzas Navales de Estados Unidos para Europa y África con base en Nápoles (sur de Italia), informaron que el pasado martes 12 de junio «se dio asistencia a las personas en apuros» que encontraron mientras realizaban operaciones de rutina en el mar Mediterráneo. Desde el Trenton se lanzaron dos lanchas y un bote de rescate y se «recuperaron» a 40 personas afectadas a las que se les prestó asistencia.

La nota aclarara también que «la tripulación del Trenton observó inicialmente aproximadamente 12 cuerpos en el agua que parecían no responder». «El RHIB (bote rígido) y el bote de rescate rápido realizaron una búsqueda de seguimiento de estos cuerpos, pero no encontraron ninguna persona más», añadieron, lo que da a entender que no recuperaron los cadáveres.

12 cadáveres

«Ninguno de los fallecidos se encuentra en la Trenton», precisó finalmente Amelia Umayam, una portavoz de la Marina de Estados Unidos. «Esperaron demasiado tiempo para una autorización y se vieron a dejar 12 cadáveres en el mar», dijo Flavio Di Giacomo, un portavoz de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM). Di Giacomo pidió a Italia dejar entrar en sus puertos al buque estadounidense para permitir el desembarco de los inmigrantes no fallecidos. «La situación es grave», añadió, en declaraciones a este diario, en momentos en los que el Trenton se hallaba frente a Augusta, un municipio italiano situado al este de Sicilia. Desde Italia, sin embargo, nadie de momento ha respondido, en una actitud de cerrazón informativa inusual hasta ahora.

La oenegé alemana Sea Watch se encontraba cerca del barco estadounidense tras ser contactada para que ayudase tras el naufragio. El ministro de Interior italiano, Matteo Salvini, amenazó que se negaría a acoger a los inmigrantes que rescatase la oenegé.