BAGDAD. Militantes y simpatizantes del Partido Comunista iraquí se manifestaron ayer por primera vez en 35 años en Bagdad para conmemorar el golpe de Estado del 14 de julio de 1958. En aquella ocasión, la monarquía reinante fue derrocada por Abdul Karim Qasem (que aparece en el cartel). El derrocado presidente Sadam Husein, que se convirtió en la mano derecha de Qasem, nunca autorizó estas marchas.