El Kremlin seguirá apoyando el programa nuclear iraní a pesar de la oposición de EEUU, que teme que Teherán fabrique armas atómicas. Rusia e Irán firmarán el 26 de febrero, en Teherán, un acuerdo para el suministro de combustible nuclear, según anunció ayer Alexandr Rumiantsev, jefe de la Agencia de Energía Atómica rusa, durante la visita a Moscú del secretario general del Consejo de Seguridad iraní, Hasan Rowhani, quien se entrevistó con su homólogo ruso, Igor Ivanov.

El combustible irá destinado a la central de Busher, construida con la ayuda técnica rusa y que comenzará a operar a finales del 2005. D. P.