Hay quienes siguen queriendo hacer ruido, lo hacen, hay quienes en lugar de defender o argumentar prefieren mentir, calumnian, hay quienes prefieren las caricaturas, los chascarrillos, cualquier cosa que distraiga y ensucie pero que no contribuya a mejorar nada, todo consiste en ser protagonista de la nada, mi pregunta es ¿hacia donde conduce eso?

No lo sé por más vueltas que le doy, quizá lleve a la confusión, desde luego tengo claro que a preocuparse y profundizar sobre los problemas de la ciudadanía, no, a buscar la solución de esos problemas aún menos.

¿Alguien puede oponerse a las ayudas a parados de larga duración de más de 52 años?

¿Alguien puede oponerse a equiparar los permisos de paternidad y maternidad?

¿Alguien se puede oponer a ayudas al alquiler?

¿Alguien puede oponerse a una reforma liberalizadora del sector de la estiba?

¿Alguien se puede oponer a que las autonomías y ayuntamientos puedan invertir el superávit?

¿Alguien se puede oponer a tener planificación ante un Brexit sin acuerdo?

Por poder, puede que alguien haya, puede que alguien se oponga a unos y a otros no, puede. Puede que haya alguien que no le importe que haya sectores a los que hay que proteger porque su situación es más débil, puede que haya quien no crea en la igualdad, puede, puede que haya a quien no le importe el destino y la previsión de un Estado miembro de la Unión Europea ante uno de los mayores retos que se haya enfrentado en su historia, puede. Eso sí, de ese alguien dudo de su consciencia social y de su compromiso con el Estado.

Este miércoles se han aprobado en la Diputación Permanente del Congreso de los Diputados seis decretos leyes con un alto contenido social, destinados a ayudar a quienes lo necesitan, con un alto sentido de Estado, con la previsión que exigen las decisiones que repercuten sobre todos los sectores económicos y sociales…

Este miércoles, la política hacía política, cumplía su cometido, mejorar la vida de los españoles y españolas, atenderle, pensar y prever en los acontecimientos próximos, lo que debe hacerse.

Mientras el gobierno gobierna sereno, con sus ojos puestos en la ciudadanía, hay quienes solo se dedica a jugar, a enredar, a frivolizar...

Espero, al menos, que esos que votaron el miércoles a todo no les de un poco de vergüenza cuando se encuentren frente a frente con los que se negaron a ayudar. Hay quien piensa en España, en los españoles y españolas, de verdad, con seriedad y compromiso, ese es el Gobierno de España con Pedro Sánchez a la cabeza.