MIL EMBUSTES

La nueva trampa separatista

Diego Mas Mas // Madrid

Han robado como Pujol, han mentido sobre el paraíso independentista como Mas y han quebrantado brutalmente la Constitución como Carles Puigdemont. Pero tras su inevitable derrota ante el Estado de derecho, ahora fingen ceder para recobrar fuerzas y atacar con más ímpetu, aduciendo hoy que están dispuestos a aceptar lo que siempre rechazaron totalmente.

Así el fugitivo Puigdemont proclama que hay otra relación posible que no sea el independentismo. Campuzano, por PDeCat, que aún hay que reforzar antes de separarse «una mayoría» que nunca han tenido. Tardà, por el ERC, que antes que independentistas son «demócratas» y (no reírse, por favor) «buena gente».

Demasiado descaro, después de haber amenazado durante años a los demás ciudadanos, contado mil embustes a sus partidarios y quebrantado gravísima y repetidamente las leyes.

Trágico error sería tomar por conversión ese nuevo engaño, increíble promesa electoral para desarmar a los incautos. Como grave error ha sido dejarles hasta el 21D la TV3.

Sólo evitaremos prontos y peores crisis en Cataluña, Baleares, País Vasco y otras regiones si el Gobierno central, depuradas sus excesivas debilidades, que merman hoy su autoridad moral, retoma y democratiza la enseñanza y los medios de titularidad pública en toda España.

PARAÍSOS FISCALES

Evasores de impuestos

Pedro Serrano // Valladolid

Los paraísos fiscales provocan infiernos sociales.

Esta es mi sentencia sobre la nueva filtración masiva de documentos conocida como los papeles del paraíso que viene a confirmar, una vez más, cómo las élites económicas y políticas de numerosos países practican la insolidaridad y se valen de la libertad de circulación de capitales para incumplir sus obligaciones fiscales.

Ellos, los que más tienen, son los primeros que deberían contribuir a las haciendas de sus países, pero precisamente son estas élites, compuestas por políticos, multinacionales y personajes de renombre, las que gozan de dinero, influencia y capacidad para montar a través de prestigiosos despachos las estructuras que les permiten evadir impuestos.

Malas noticias para las clases medias y bajas de la sociedad que son quienes principalmente sostienen con su sudor y sus impuestos este mundo cada más frágil y lleno de incertidumbres.

Malas noticias para la concordia y el bien común.

Malas noticias que deben servirnos de acicate para obligar a los políticos a cambiar las cosas y a poner en evidencia a estos malos empresarios y peores patriotas.