LA CONSTITUCION

Diagnóstico políticoy su patología

Fernando García Figueroa

Cáceres

La situación político-social en España está tomando una vertiente peligrosa para la convivencia pacífica. La corrupción política está atentando contra los fundamentos de la democracia. Hay que adentarse en nuestra Carta Magna y afirmar, sin temor a equivocarnos, que es necesaria una reforma en alguno de sus artículos para adaptarlos al momento social y político de nuestro país. Hay que partir de una Ley Electoral cuya doctrina principal contemple la directa representación del ciudadano, toda vez que en la actualidad esta representación se hace a través de los partidos políticos, que son los que eligen a los miembros que figuran en las listas electorales. Es a partir de este momento en que "nuestros representantes", protegidos por su partido y una legislación de aforamiento, comienza una etapa de corruptores y corrompidos, actuaciones delictivas, financiaciones de partidos, redes de malversación, etcétera. Es en esta situación de amoralidad cuando los políticos se despreocupan de los problemas de los ciudadanos sin dejar de proteger a lobbies bancarios, verdaderos responsables de la situación de desahucios, suicidios y desesperación de muchos ciudadanos. Es aquí, cuando la acción civil, harta de estos desmanes, comienza a reaccionar con esa figura de acoso que se ha hecho popular como 'escrache'. Somos muchos los que apoyamos estos movimientos sociales; pero ahora bien, no aceptamos bajo ningún concepto ni justificación la pretensión de estos grupos, que pretenden subvertir nuestro sistema democrático. El 'escrache', en estos momentos, en nuestro país, viene alentado, sin lugar a dudas, por una izquierda que ha perdido sus valores y no se resigna a perder el poder que las urnas le han negado. Apoyamos todo movimiento social que, de forma legal, haga llegar al Parlamento las quejas de los ciudadanos para que sean atendidos por aquellos que eufemísticamente llamamos nuestros representantes.

Nuestro diagnóstico es que, o bien los políticos se toman en serio los problemas sociales, o podemos tener algún reflejo de "la semana trágica de Barcelona.

UNA ESPAÑA FUERTE

El modelo autonómico

Francisco Sánchez Sinovas

Cantabria

El diputado del PP Ignacio Astarloa ha dicho que "se ha hipertrofiado el modelo autonómico y roto el equilibrio entre lo común y lo diverso". Sorprenden bastante estas declaraciones ante el hecho evidente de que es en Castilla donde resulta absolutamente aberrante el mapa autonómico y donde lo común castellano ha sido diluido en esas cinco autonomías llamadas Cantabria, La Rioja, Castilla y León, Madrid, y Castilla-La Mancha, inventos de los que han sido o son presidentes autonómicos muchos dirigentes del PP y que no quieren caer en la cuenta de que una Castilla unida es la que hace viable una España fuerte y frena los secesionismos insolidarios, y no mediante los pactos con los nacionalistas.