La directiva vecinal de San Miguel respiró ayer aliviada comprobando que, muchos años después, esta semana ha empezado a ser cierto que el túnel convertido en refugio de toxicómanos va a ser tapiado definitivamente. Mil veces ha denunciado La Unión de San Miguel que el túnel que une el cerro de San Lázaro, próximo al colegio público, con la variante norte recibía cada día la visita de drogadictos. Como ayer mismo mientras la excavadora no dejaba de sacar basura del interior del túnel aunque la cara del presidente vecinal, Jaime Collado, era ayer más sonriente.