El ayuntamiento está buscando espacios urbanos donde instalar soportes publicitarios para evitar la proliferación de carteles anunciadores en fachadas fundamentalmente de edificios y bajos comerciales abandonados. La concejalía de Cultura quiere acabar con la costumbre de pegar los anuncios en cualquier parte como también con la contaminación acústica que supone la megafonía publicitaria.

Este es el recurso que utiliza el propio ayuntamiento desde hace años para difundir la programación del Teatro Alkázar y que la Asociación de Vecinos Zona Centro ha pedido sustituir por medios más avanzados y menos molestos que "el que realiza desde altavoces que un vehículo hace desgañitar por toda la ciudad".

La edil delegada, Lidia Regidor, ha reconocido el exceso de volumen. "Ya se lo dije a la empresa como también que recorriera los barrios y no se limitara al centro para que se entere todo el mundo de la programación del Alkázar y como creo que ya se sabe y estoy de acuerdo en que es contaminación acústica, estamos pensando eliminarla".

Los vecinos han sugerido al ayuntamiento que lo sustituya por la difusión en los colegios y los institutos, en los domicilios mediante buzoneo, en las asociaciones de todo tipo o en las empresas a través de paneles. Mientras se lo piensa, está buscando dónde colocar en el centro y en los barrios una especie de paneles electorales donde pegar los carteles de actividades públicas o particulares. A partir de entonces será obligatorio utilizar los soportes reservados a publicidad o el ayuntamiento tendrá que recurrir a las sanciones.