Las procesiones podrán salir a la calle esta Semana Santa como en años anteriores. El presidente de la Unión de Cofradías, Luis Serrano, dijo el pasado lunes que con 24.000 euros de los 44.000 que les debe el ayuntamiento podrían mantener los desfiles. Ayer lo mantuvo y esa es precisamente la cantidad que el gobierno se ha comprometido a abonar de forma inminente al colectivo.

Así lo manifestó ayer el gobierno a través de una nota de prensa que señala textualmente: "El portavoz del gobierno municipal, Francisco Barbancho, informa de que se les van a abonar los 24.000 euros correspondientes a la cantidad comprometida". Se trata eso sí de la parte correspondiente al 2009 porque todavía restarían otros 20.000 euros correspondientes a la subvención presupuestada en 2007.

Para justificar estos retrasos, la alcaldesa manifestó ayer, en la misma nota de prensa, que "el asunto administrativo es más complejo de lo que parece y de lo que nos gustaría".

Precisamente, los cofrades se han quejado de la actitud de la alcaldesa porque afirman que han intentado durante dos meses que les recibiera para tratar el asunto de las subvenciones, sin éxito. La última vez que el vicepresidente intentó hablar con Blanco fue ayer, pero esta se encontraba en la celebración de la fiesta del Cerezo en Flor.

Aún así, ante estas quejas, Blanco manifestó ayer: "En ningún momento me he negado a recibir a la Unión de Cofradías", aunque acto seguido, señala: "Queríamos tener el tema económico resuelto para dar una respuesta" y afirma que no tendrá inconveniente en recibir a los miembros de la Unión "cuando lo soliciten por la vía pertinente".

Pero, para acallar las críticas, la alcaldesa ha querido dejar claro que "siempre hemos defendido y amparado la celebración de la Semana Santa placentina", lo que no han puesto en duda las cofradías, aunque todas coinciden en que la subvención siempre se hace esperar.

La diferencia la ha marcado este año el desembolso realizado por la Unión para obras en Santo Domingo, que acoge los pasos de todas las cofradías, como la renovación de la instalación eléctrica o medidas de seguridad, además de para adquirir nuevos faroles para los hermanos de luz y otros enseres. Es donde ha ido el dinero de los cofrades y lo que hace que la Unión necesite la subvención municipal para sus desfiles.