Las obras de renovación de tuberías que se están llevando a cabo en la calle San Fulgencio, en Miralvalle, dejaron ayer sin luz durante una hora a 800 familias, según los datos de Iberdrola. El motivo fue que la máquina que realiza las zanjas picó un cable de media tensión, lo que hizo que se interrumpiera el suministro eléctrico.

Ocurrió en torno a las 9.30 horas y, aunque en algunos bares el corte no duró más que diez minutos, en muchas casas la luz no volvió hasta una hora más tarde.

La compañía del agua, que tiene subcontratada a la empresa que realiza las zanjas, justificó ayer la avería en que el cable afectado no estaba señalizado y el tubo por el que discurre estaba pegado a la tubería de agua.

Iberdrola en cambio aseguró que la calidad del suministro en la región es muy buena y solo se ve afectada por "agentes externos como este" y por las cigüeñas.