Las depuradoras de la piscina de verano de Plasencia tienen que adaptarse a la normativa actual. Por eso, ha comenzado ya la primera fase de obras, por un valor de unos 200.000 euros y que estará concluida a finales del mes de mayo. Según ha explicado el alcalde, se ha podido financiar gracias a fondos europeos transfronterizos POCTEC y ahora, el ayuntamiento está buscando financiación para ejecutar la segunda y tercera fases, que se acometerían ya después del verano. En total, la adaptación costará en torno a un millón de euros.

Paralelamente, el ayuntamiento está realizando actuaciones en el interior de la instalación para mejorarla de cara a la nueva temporada. Así, se están instalando 35 nuevos árboles, almeces y fresnos en todo el perímetro «para tener una sombra permanente», aunque señaló que hasta dentro de unos dos o tres años no darán una sombra intensa.

Después, se tratará el césped, que pasará por una modificación integral. A su vez, la calle del acceso lateral de la piscina se está asfaltando con el plan del 2018.

Por otro lado y también en la ciudad deportiva, Fernando Pizarro señaló que se ha decidido transformar el campo de fútbol principal en un campo de césped artificial porque el césped natural solo permite su uso entre una y dos veces por semana y, con el artificial, se podría utilizar a diario. Costaría unos 700.000 euros y están buscando financiación.