La residencia para enfermos de alzheimer que se construye desde ayer en la antigua colonia militar de la Inmaculada permitirá crear un centenar de puestos de trabajo. La Junta, que gestionará el centro, será la encargada de la contratación del personal necesario para atender a 96 personas, 80 pacientes aquejados con este mal y 16 mayores dependientes.

Así lo indicó ayer la consejera de Bienestar Social de la Junta, Leonor Flores, quien asistió al acto de colocación de la primera piedra junto a Jesús Medina, presidente de Caja Extremadura --cuya obra social financia la construcción de la residencia con 3,6 millones-- y la alcaldesa Elia Blanco, dado que el consistorio cedió a la Junta los 10.000 metros cuadrados del solar.

Flores destacó que los puestos de trabajo serán para profesional sanitario como psiquiatras, psicólogos, trabajadores sociales o auxiliares, que según el plazo de ejecución de la obra --de 13 meses-- podrán estar trabajando en el primer trimestre del 2007.

FUNCIONAL Y ACCESIBLE Los arquitectos Manuel Sainz de Vicuña y Javier Hergueta son los autores del proyecto, que contempla un edificio de cuatro plantas, aunque a simple vista no se apreciará tanta altura, ya que se aprovecharán los desniveles del terreno. El inmueble irá en el centro del solar y ocupará el 20% (unos 1.700 metros cuadrados en planta) mientras que el resto será para zonas verdes, 80 aparcamientos y dos calles.

Los arquitectos destacaron que el edificio será "moderno, pero muy funcional y de fácil accesibilidad", ya que contará con rampas de acceso y salida por la parte posterior en todas las plantas por si fuera necesario evacuar rápidamente a los enfermos. Además, estará adaptado a sus características especiales porque "hemos quitado los radiadores, con los que suelen chocar, y colocado ventanas especiales para que no las puedan abrir".

La consejera subrayó ayer la importancia de la residencia, porque "un 7% de la población mayor de 65 años sufre algún tipo de demencia senil y a partir de los 80 se dispara al 20%" y agradeció la colaboración del ayuntamiento y la inversión de Caja Extremadura. Su presidente también se mostró muy satisfecho por tratarse de un proyecto financiado íntegramente por la obra social, mientras la alcaldesa recordó que el centro tendrá carácter provincial y agradeció el interés de Ibarra y Medina por hacerlo realidad.