Las rebajas de verano, como así se debería de llamar al periódico de descuentos y promociones comprendido entre el 1 de julio y el 31 de agosto y no días antes ni días después, están llegando a su recta final y en estos días se volverán a ver más descuentos en artículos que ya están rebajados desde el comienzo. Es una forma de seguir atrayendo público y promoviendo las ventas.

Hasta la fecha, el periodo de rebajas, en líneas generales, «ha estado bien, como viene ocurriendo en años anteriores», señalaba José Luis Ventura, directivo de la Asociación de Vecinos y Comerciantes Vera Elena, y algo parecido reseñaba Fernando Santiago, presidente de la Asociación de Comerciantes Zona Centro, quien señala que «en los comercios pequeños las ventas son más pausadas, más lentas, pero el nivel de ventas se asemeja a los de años anteriores; no hay consumo excesivo y han estado bien hasta ahora».

Santiago también comentaba que «ahora en agosto se notarán un poco más de ventas, gracias a todas las personas que vienen a pasar el verano a las comarcas cercanas y que siempre se acercan a realizar algunas compras de rebajas hasta Plasencia, con lo que las expectativas son buenas, como cada año», augura.

En cambio, el parecer de Miguel Ángel Rodilla, vocal del Círculo Empresarial Placentino, es diferente. «En mi opinión, los periodos de rebajas están difuminados, es decir, que no hay uno concreto, sino que durante todo el año podemos encontrar descuentos y promociones, con lo que el encanto de las rebajas se pierde y la gente ya no sale tan exclusivamente a hacer sus compras de rebajas», asevera.

Periodos regulados

Eso sí, todos coinciden en que una de las soluciones es que se vuelva a las épocas de no hace mucho tiempo en las que las rebajas eran un gran acontecimiento del año o de temporada, sería «regularlas, para que todos tengamos las mismas oportunidades y compitamos en igualdad de condiciones», añade Rodilla.

Para José Luis Ventura, «la nueva gerente de comercio va a ser de gran ayuda para los comerciantes y las asociaciones, porque los que estamos dentro de las asociaciones, muchas veces no podemos atender nuestros negocios y a la vez las demandas que nos llegan hasta las asociaciones», subrayaba.

Gasto moderado

En cuanto a los compradores, muchos tienen en cuenta el dinero a gastarse en las rebajas, aunque otros no y salen y compran lo que necesitan o lo que les gusta, como es el caso de Raquel que va a las rebajas «por dar una vuelta y si veo algo que me gusta, me lo compro», señalaba.

Muchos, en cambio, tienen un presupuesto más o menos establecido para gastar. «Yo cada año me suelo gastar unos 80 o 100 euros en las rebajas de verano, porque hay que renovar siempre la ropa y no está mal darse algún que otro capricho, ahora que podemos», explicaba María.

Por otra parte, recordar que una de las iniciativas para dinamizar el comercio y las ventas se llevará a cabo en septiembre y tendrá como temática el personaje Harry Potter. Es una iniciativa de la concejalía de Comercio para fomentar el consumo en el comercio tradicional y darlo a conocer. Lo hará en colaboración con Shin Gumi Events, el 13 y 14 de septiembre.

Hasta la fecha ya hay más de 60 comerciantes inscritos y se espera que la cifra aumente durante las próximas semanas.